Mil placeres no valen un tormento de amor.
Francesco Petrarca
Acabo de regresar del estudio de doblaje donde hablé en un micrófono como Severus Snape absolutamente por última vez.
Alan Rickman
Las personas que no cometen errores, les falta audacia y el espíritu de aventura. Ellas son las que frenan las ruedas del progreso.
Dale Turner
Oro, poder y riquezas muriendo has de abandonar, al cielo sólo te llevas lo que des a los demás.
Eduardo Marquina
Lo más importante en cualquier relación no es lo que obtienes, sino lo que das.
Eleanor Roosevelt
Ha penetrado el árbol en mis manos, la savia por mis brazos ha ascendido el árbol en mi pecho se hizo grande, hacia abajo, salen de mí las ramas como brazos. Árbol eres, musgo eres, eres violeta que acaricia el viento... Mueren los árboles y el sueño permanece.
Ezra Pound
Un cuerpo débil debilita al espíritu.
Jean-Jacques Rousseau
¡No pienses, sino mira!
Ludwig Wittgenstein
Cuando escribo una canción no analizo lo que voy escribiendo. La realidad está a mi alrededor, estoy dentro de un ambiente y se abre el grifo. No estoy pensando en que tengo que escribir sobre eso. No puedo decidir: Hoy voy a escribir una canción.
Manu Chao
Se que me puedo ir y morir en cualquier momento.
Nach
No importa la edad que tengas, cuando sales al mundo lo mejor es tomarse de las manos y permanecer juntos.
Robert Fulghum
El pecado contra el Espíritu consiste en conocer algo como bueno y odiarlo en cuanto bueno.
Simone Weil
Por pocas contrariedades con que tropiece una verdadera pasión, produce probablemente más sufrimiento que gozo.
Stendhal
En la era industrial avanzada, las masas no tienen más remedio que desahogarse y reponerse como parte e la necesidad de regenerar las energías para el trabajo que consumieron en el alienante proceso productivo. Esta es la única base de masas de la cultura de masas. En ella se cimenta la poderosa industria del entretenimiento que siempre crea, satisface y reproduce nuevas necesidades.
Theodor Adorno
Insisto en ser libre.
Uma Thurman
La mariposa confiada duerme en la campana del templo.
Yosa Buson