¿Quién dijo que todo está perdido? Yo vengo a ofrecer mi corazón...
Fito Páez
Las pequeñas cosas son las que más importan.
Arcángel
Cuando pasan por tus ojos bellos rostros bellos cuerpos Y tú no te das ni cuenta hasta que los tienes lejos.
Axel Fernando
El mundo odia el cambio, sin embargo, es lo único que ha traído el progreso.
Charles Kettering
La edad no se mide por los años. Hay gente que nace vieja y cansada, mientras que otros van tienen mucha energía a los setenta.
Dorothy Thompson
Soy tan afortunada de tener una segunda piel para recorrer.
Francisca Valenzuela
Asumí el control del merchandising no porque pensara que iba a hacerme rico, sino porque deseaba controlarlo. Deseaba ser un soporte por cuestiones sociales, seguridad, y razones de calidad. No quería que alguien usara el nombre de Star Wars en una pieza de chatarra.
George Lucas
Está loca por mí. ¿Qué mujer no lo está? Yo sé que va usted a preguntarme cuál es mi secreto. El secreto es no darles a entender que se las quiere. No ir nunca tras ellas. Que ellas vayan detrás de ti. Hay que avivar el cariño del amor con el abanico de la indiferencia.
Groucho Marx
Bauer, evidentemente, confunde la nación, que es una categoría histórica, con la tribu, que es una categoría étnica.
Iósif Stalin
La juventud necesita creerse, a priori, superior. Claro que se equivoca, pero esta es precisamente el gran derecho de la juventud.
José Ortega y Gasset
Un inglés no bromea jamás cuando se trata de una cosa tan importante como una apuesta.
Julio Verne
Tengo a las amigas ya hartas de escucharme, las tengo fritas.
Penélope Cruz
Mucha gente piensa, o por lo menos siente, que el que no tiene sus hábitos y sus entusiasmos es un enemigo. A mí me parece lógica la intransigencia tratándose de ideas esenciales.
Pío Baroja
Casamiento y mortaja, del cielo baja.
Proverbio
Quiero perder el valor que gané por miedoso.
Ricardo Arjona
No basta con que digamos: Yo amo a Dios pero no amo a mi prójimo. San Juan dice que somos mentirosos si afirmamos que amamos a Dios y no amamos a nuestro prójimo. Es muy importante para nosotros darse cuenta de que el amor para que sea auténtico tiene que doler.
Teresa de Calcuta