Quien no es envidiado, no es digno de serlo.
Esquilo
La familia, la sociedad, la cultura, nos pone en un molde; cuando nos salimos del molde, empieza la curación y, no solo eso: hay que hacer algo que nunca haya hecho uno y mientras más difícil, mejor.
Alejandro Jodorowsky
En Sicilia, de donde vienen sus padres, la ley no es una idea agradable desde que los griegos fueron derrotados. Tiendo a advertir las ruinas en las cosas, quizás porque nací en Italia...
Arthur Miller
El arte, para mí, es un incontenible impulso interior que desaparece o se debilita cuando ando lejos de mis pagos...
Benito Quinquela Martín
En economía resulta un error, tan generalizado como evidente, suponer que, en un momento determinado y en un mercado dado, todas las mercancías guardan una definida relación de intercambio recíproco, en otras palabras, que pueden ser mutuamente intercambiadas a voluntad en cantidades definidas.
Carl Menger
Hay alegría en la racionalidad, la felicidad es la claridad de la mente.
Dan Barker
La lámpara del genio se extingue más rápido que la lámpara de la vida.
Friedrich Schiller
Lo que los demás rechazan de ti, cultívalo. Eso eres tú.
Jean Cocteau
Cuidado con lo que pretendes ser, porque eres es lo que pretendes ser.
Kurt Vonnegut
La confianza es la mitad del triunfo.
Marlene Dietrich
Dios nunca te ha llamado a ser otro más que tú mismo. Pero te llamó a ser el mejor tú que puedas ser. De lo que realmente se trata es de quién eres tú en tus mejores momentos.
Max Lucado
Tengo 78 años, ¿Si escribir es tan frustrante y difícil para mí, qué me ha llevado a seguir haciéndolo? Y la respuesta es muy tonta, es que no sé cómo parar. Si pudiera dejar de escribir lo haría, pero no sé cómo hacerlo.
Philip Roth
El secreto de la educación está en el respeto al discípulo.
Ralph Waldo Emerson
La Tierra es una nave espacial que se nos entregó sin manual de instrucciones.
Richard Buckminster Fuller
Nuestras leyes llaman a la casa de un hombre su castillo, entendiendo con eso que puede su dueño defenderse dentro de ella.
William Lambarde
En su lucha contra el individuo, la sociedad tiene tres armas: ley, opinión publica y conciencia.
William Somerset Maugham