Toda el agua de los ríos no bastaría para lavar la mano ensangrentada de un homicida.
Esquilo
Que quien por un vidrio mira que hace algún color distinto todo cuanto ve con él está del color del vidrio.
Agustín Moreto
Hombre, hazte esencial: pues cuando el mundo perece, la contingencia cesa, la esencia perdura.
Angelus Silesius
Con la paciencia y la tranquilidad se logra todo... y algo más.
Benjamin Franklin
La sabiduría es mejor que la plata y el oro.
Bob Marley
Uno no sabe lo que es la sed hasta que bebe por primera vez.
Carlos Ruiz Zafón
El olvido es una gentileza de Dios.
Facundo Cabral
Es más fácil eludir algo cuando a uno se lo dicen desde afuera que cuando surge de las profundidades del propio ser.
Irvin D. Yalom
He sido un ser egoísta toda mi vida, no en teoría, pero sí en la práctica.
Jane Austen
El placer es felicidad de los locos, la felicidad es placer de los sabios.
Jules Barbey d'Aurevilly
La tranquilidad es felicidad cuando es reposo, cuando la hemos apetecido y cuando, por fin, la hallamos después de haberla buscado; pero equivale a infelicidad cuando la tranquilidad es nuestra sola ocupación.
Ludwig Börne
Tengo nombre de gringo. Onecén es el nombre de un santo de los gringos. Aparece en sus moneditas y se escribe separado con una letra "te" al final. One cent.
Luis Sepúlveda
Para escribir un buen libro no considero imprescindible conocer París ni haber leído el Quijote. Cervantes cuando lo escribió, aún no lo había leído.
Miguel Delibes
Según las cosas que a uno le proporcionen la felicidad, éstas conducirán a un juego en el que la suma siempre será cero: como una adicción, que requiere constantes dosis de adquisiciones y, a menudo que se tenga más de algo que los vecinos, nada de lo que se tiene importa demasiado.
Mihály Csíkszentmihályi
El hombre hace suyo un lugar no sólo con el pico y la pala, sino también con lo que piensa al picar y palear.
Sándor Márai
¿Y existe el Infierno, o acaso nos forjamos uno propio en la tierra?
Stephen King