La verdad triunfa por sí misma, la mentira necesita siempre complicidad.
Epicteto
Ciertos maniáticos homicidas son personas de mente tranquila y aparentemente inofensiva... hasta deliciosa... a veces.
Agatha Christie
La imaginación no caza en jaurías: para imaginar eficazmente, el niño necesita la soledad mental absoluta; saber que únicamente entre las páginas del libro, si tiene suerte y si el libro lo interpela, descubrirá por sí mismo el hilo de una historia secreta contada únicamente para él. A esa singular lección aspira toda la literatura.
Alberto Manguel
El mundo es un puente; transitad por él, pero no levantéis sobre él vuestra morada.
Anónimo
Asesorarse con los técnicos del Fondo Monetario Internacional es lo mismo que ir al almacén con el manual del comprador, escrito por el almacenero.
Arturo Jauretche
Y siento ganas de llorar o hacer la revolución cuanto antes.
Blas de Otero
Ninguna mujer contrae matrimonio por interés: todas tienen la astucia, antes de casarse con un millonario, de enamorarse de él.
Cesare Pavese
Yo no imparto enseñanza al que no se esfuerza sinceramente en aprender.
Confucio
En política, unos salen a tirar, otros tiran a salir y otros salen a que se los tiren.
Filósofo de Güémez
Mientras permaneció el sacerdote como tipo superior, los hombres de valía de todas las clases fueron despreciados.
Friedrich Nietzsche
No tengo miedo a caminar sólo por este mundo.
Gerard Way
Nunca he considerado a ningún hombre superior a mí, ni dentro, ni fuera de la cárcel.
Nelson Mandela
Has de existir, por lo visto la encuesta se encarga de ti.
Paco Bello
Isak Dinesen dijo que ella escribía un poco cada día, sin esperanza y sin la desesperación. Quiero eso.
Raymond Carver
Los niños aceptan inmediatamente y con toda naturalidad la alegría y la dicha, siendo ellos mismos naturalmente dicha y alegría.
Victor Hugo
Ser o no ser; ésta es la cuestión: ¿es de más noble espíritusufrir las arremetidas y los dardos de la adversa fortuna, o, por el contrario, empuñar las armas contra un mar de adversidades, y terminar con ellas haciéndoles frente? Morir: dormir; nada más.
William Shakespeare