La desgracia de los hombres proviene siempre de que colocan mal su precaución y su confianza.
Epicteto
2do. Diluvio. Noche de la noche llega ante las aguas y el fuego. Hombres meditad. El mar avanzará, inundará en diluvio, se derretirán los cascos polares. El eje de la Tierra regresará y el ecuador será polos. El mar será sangre. Final de finales.
Benjamín Solari Parravicini
El hombre es un ser racional y continuamente está en busca de la felicidad que espera alcanzar mediante la gratificación de alguna pasión o sentimiento. Rara vez actúa, habla o piensa sin una finalidad o intención.
David Hume
Cuanto más trabajo, más suerte tengo.
E. L. James
La ley de la naturaleza del hombre es la igualdad.
Eurípides
Un hombre es un tonto si bebe antes de los cincuenta, y otro tonto si no lo hace después.
Frank Lloyd Wright
En la mujer, el orgullo es a menudo el móvil del amor.
George Sand
La sangre noble es un accidente de la fortuna; las acciones nobles caracterizan al verdadero grande.
Giuseppe Baretti
El tiempo es la espera de una mañana improbable o de fecha segura que no llega y pasa y engendra otra espera.
Luis Alfredo Arango
Era más probable que consiguiera robar la luna. Al menos sabía dónde buscar la luna por la noche.
Patrick Rothfuss
El cobarde se llama a sí mismo prudente.
Publilio Siro
El mundo es tu cuaderno de ejercicios, en cuyas páginas realizas tus sumas. No es la realidad, aunque puedes expresar la realidad en él si lo deseas. También eres libre de escribir tonterías o embustes, o de arrancar las páginas.
Richard Bach
La verdad es conformidad a veces, a veces no.
Robert Pirsig
Los amantes son como el atardecer y el amanecer: hay ese tipo de cosas todos los días pero muy rara vez los ven.
Samuel Butler
Éste había optado por un método de monta que implicaba caerse de la silla cada pocos segundos.
Terry Pratchett
Sospecho que uno de los activos fundamentales del capitalismo se deriva del hecho de que la imaginación de los economistas, incluyendo a sus críticos, está muy por detrás de su propia inventiva, la arbitrariedad de su empresa y la crueldad de la manera en que procede.
Zygmunt Bauman