Recuerdo la vuelta en Mónaco que le valió una placa, la vuelta más perfecta que un piloto haya hecho.
Enzo Ferrari
Si has sido alguna vez pobre de verdad, seguirás siéndolo en lo íntimo de tu corazón durante el resto de tu vida.
Arnold Bennett
La mayor cobardía de un hombre es despertar el amor de una mujer sin tener la intención de amarla.
Bob Marley
Este mundo no se morirá de una bomba atómica como dicen los diarios, se morirá de risa, de banalidad, haciendo un chiste de todo, y además un chiste malo.
Carlos Ruiz Zafón
Las peliculas deben comenzar con un terremoto e ir creciendo en accion.
Cecil Blount DeMille
Si pudiera me votaría a mí mismo.
Cristiano Ronaldo
Lo esperado no sucede, es lo inesperado lo que acontece.
Eurípides
La verdad no es lenguaje del cortesano; solamente surge de labios de aquellos que no confían ni temen de la potencia ajena.
Giuseppe Mazzini
No quiero imponer mi presencia al público durante demasiado tiempo. La gente se cansa de ver siempre las mismas caras.
Juan Manuel Fangio
El psicoanálisis es aquella enfermedad mental consistente en creer que ella es su terapéutica.
Karl Kraus
Sí, sin vacilaciones ni reservas mentales ni de ningún orden, a las autonomías. Pero no, claramente no, a un entendimiento ligero de las autonomías como disolución de una patria común forjada por la historia.
Leopoldo Calvo-Sotelo
Sin embargo, pronto comprendió que estaba en el charco de lágrimas que había derramado cuando medía casi tres metros de estatura. ¡Ojalá no hubiera llorado tanto! -dijo Alicia, mientras nadaba a su alrededor, intentando encontrar la salida-. ¡Supongo que ahora recibiré el castigo y moriré ahogada en mis propias lágrimas!
Lewis Carroll
Un marido es una especie de pagaré: la mujer se cansa de atenderlo.
Oscar Wilde
En la ciencia uno se trata de explicar lo que no se sabía antes de manera que se entienda. En la literatura uno se comporta justo al contrario.
Paul Bourget
Ni la prosperidad envanece al sabio ni la adversidad lo abate.
Séneca
El principal engaño que se valora en las operaciones militares no se dirige sólo a los enemigos, sino que empieza por las propias tropas, para hacer que le sigan a uno sin saber adónde van.
Sun Tzu