¡Quieren ser libres y no saben ser justos!
Emmanuel Joseph Sieyès
En la naturaleza están todos los estilos futuros.
Auguste Rodin
Las personas felices tienen un defecto del que jamás se corrigen: es el de creer que los desgraciados lo son siempre por su propia culpa.
Edme-Pierre Beauchêne
La felicidad es efímera; la certidumbre, engañosa. Sólo vacilar es duradero.
Frédéric Chopin
La libertad es la necesidad comprendida.
Georg Wilhelm Friedrich Hegel
La consciencia de la vanidad es un poderoso desinfectante: llena la religión, como llena la vida, de fortaleza, dignidad y benevolencia.
George Santayana
Todo dominio injusto, toda violencia, todo acto de egoísmo ejercido en daño de un pueblo, es violación de la libertad, de la igualdad y de la fraternidad de los pueblos. Todos los pueblos deben prestarse ayuda para que desaparezca.
Giuseppe Mazzini
En la gran mesa de juego que es la vida, el incómodo no es el tramposo -que se limita a jugar de una determinada manera, pero participa- sino el que rompe la baraja.
Johan Huizinga
La temeridad cambia de nombre cuando obtiene éxito. Entonces se llama heroísmo.
Laurence Sterne
Cada nueva teoría se encuentra con la oposición y el rechazo al principio.
Ludwig von Mises
El cine... Es extraño. La gente compra una entrada. Esa entrada es su puerta a una fantasía que tú creas para ellos. La tierra de la fantasía, eso es todo, y tú das vida a sus fantasías. Fantasías de amor, de odio o de lo que sea.
Marlon Brando
Desnuda eres tan simple como una de tus manos: lisa, terrestre, mínima, redonda, transparente. Tienes líneas de luna, caminos de manzana.
Pablo Neruda
Quería mostrar a la Princesa que cuando suelen otros desesperarse, yo sabía sonreír, y que donde otros son humillados, yo era triunfador. ¡El orgullo ha sido siempre mi mayor virtud!
Ramón María del Valle-Inclán
No me obsesiono con ser el más rico del cementerio.
Ramón Melendi
La Santidad no es el lujo de unos pocos; es un sencillo deber que tenemos tú y yo.
Teresa de Calcuta
La enseñanza de que el matrimonio es un sacramento, da al clero la capacidad de juzgar acerca e la legalidad de los matrimonios y, consecuentemente, la de decidir cuáles son los hijos legitimos; y, de ahí, la de decidir también sobre el derecho de sucesión en las monarquías hereditarias.
Thomas Hobbes