El erotismo monta mecanismos que sustituyen el amor por un álgebra de sexos de combinaciones muy conocidas.
Emmanuel Berl
¿Dónde empieza el final del mar?
Alessandro Baricco
¡Anarquía! ¡Oh, portadora de luz! ¡Expulsa la noche! ¡Aniquila los gusanos!
André Breton
La revolución no se lleva en los labios para vivir de ella, se lleva en el corazón para morir por ella.
Che Guevara
La mejor suerte de todas es la suerte de hacer algo por ti mismo.
Douglas MacArthur
Con esta revolución tipográfica y esta variedad multicolor de las letras busco redoblar la fuerza expresiva de las palabras.
Filippo Tommaso Marinetti
Cuando la sabiduría entre en tu corazón y la ciencia te endulce la vida, la prudencia velará por ti y la inteligencia te protegerá, y entenderás qué es lo recto, lo juicioso y lo equitativo, sí, cuál es el buen camino.
Irvin D. Yalom
El fútbol profesional sólo es dinero y corrupción. Es capitalismo, y el capitalismo es muerte. No quiero estar en un sistema que se basa en que la gente gana dinero gracias la muerte de otros en Sudamérica, África, Asia. Simplemente, mi yo interior me impide seguir en esto.
Javi Poves
Justicia es lo que un hombre se hace por sí mismo.
Johnny Depp
- Estás buena, eres simpática y tienes unos ojos preciosos. - Disculpa. Estoy casada, tengo dos hijas y estoy embarazada. - Eso es lo que llamamos un hat-trick. - Siento no habértelo dicho. Estaba disfrutando de que fueras amable conmigo.
Leslie Mann
la voz tiene poder, la gente escucha cuando hablamos; no se trata de combatir el terrorismo con la violencia sino con las palabras.
Malala Yousafzai
La más horrible variante de la soledad: la soledad del que ni siquiera se tiene a sí mismo.
Mario Benedetti
El amor es el ala que Dios ha dado al hombre para volar hasta Él.
Miguel Ángel Buonarroti
No quiero estar sin ti, si tú no estás aquí me falta el sueño, no quiero andar así, latiendo un corazón de amor sin dueño.
Rosana
El dinero no compra la elegancia, compra su simulación.
Rubem Fonseca
Cuando amamos, el amor es demasiado grande para caber entero en nosotros; irradia hacia la persona amada, encuentra en ella una superficie que lo detiene, lo obliga a regresar hacia su punto de partida y este rebote de nuestro propio cariño es lo que llamamos los sentimientos del otro y que nos fascina mas que en el viaje de ida, porque no reconocemos que procede de nosotros.
Will Rogers