Fue un honor oír salir de la boca de Dre que le gustaba mi mierda. Mientras crecía, yo fui uno de sus mayores fans. Es el mejor productor de hip hop de la historia.
Eminem
No lo sé. Pero en la otra guerra que le siga, sí sé, seguro, que se tendrá que luchar empuñando un cuchillo.
Albert Einstein
El primer sentimiento fue el de la repugnancia, el segundo fue el de la indiferencia, y el tercero la curiosidad.
Alejandro Dumas
Estar enojado es vengar las culpas de otros en nosotros mismos.
Alexander Pope
La mayoría de los cargos del país están ocupados por fascistas de confianza. Lo que no hagan por fidelidad, lo harán por temor, ya que no ignoran que se les fiscaliza. La traición se castiga terriblemente.
Benito Mussolini
Mi gestión no dudo en luchar contra los narcotraficantes.
Daniel Scioli
¡Ingenio! ¡Cuán delicioso al gusto refinado del hombre! Como vehículo del entendimiento, es inapreciable; pero, como sustituto de él, es una fatal pestilencia.
Edward Young
En mi experiencia las mejores guitarras, las más caras, son aquellas que son más fáciles de tocar. Porque están hechas para ser tocadas.
Eric Clapton
Cada persona nace con una sola gracia y la felicidad consiste en descubrirla a tiempo.
Isabel Allende
Ambiguas horas que mezclan al borracho y al madrugador.
Joaquín Sabina
Una línea, una zona de color, no es realmente importante porque registre lo que uno ha visto, sino por lo que le llevará a seguir viendo.
John Berger
La seguridad y la quietud han desaparecido de la vida de los hombres desde 1914.
Konrad Adenauer
¡Ah, sí! Es preciso entender esta especial psicología de los locos, por la cual, fíjese, se puede estar incluso seguro de que un loco nota, puede notar perfectamente un disfraz delante de él, y tenerlo por tal; y, sí, señores, sin embargo, creer en él; igual que hacen los niños, para los cuales es a la vez juego y realidad.
Luigi Pirandello
Amarte a ti es la verdad más mentirosa, es lo mejor de lo peor que me ha pasado.
Ricardo Arjona
La primera regla del arte de reinar es saber sufrir el odio ajeno.
Séneca
No precisa agua de manantiales, pues tiene mis ojos, ni sol, con la belleza de su figura.
Yehuda Haleví