Escriba libros sólo si lo que va a decir en ellos usted nunca se lo confiaría a nadie.
Emil Cioran
Ser puertorriqueño es mucho más que tener un certificado. Para serlo, hay que sentirlo de corazón, como lo siento yo.
Chayanne
Hay que seguir adelante, vencer el cansancio, el miedo y el deseo. La fatiga disfraza sus intenciones. La fatiga es sueño, curiosidad y desgano en los caminantes. Abre bien los ojos, hijo, y sigue al pájaro Pujuy. El no se equivoca. Su destino es como el nuestro: caminar para que otros no se pierdan.
Ermilo Abreu Gómez
Hazlo o no lo hagas. Pero no lo intentes.
Frank Oz
A ninguno debe ofendernos que alguien se conforme con nosotros, a falta de quien fue mejor.
Javier Marías
La vida está llena de obligaciones que se cumplen cuanto más voluntad se tenga de infringirlas atrevidamente.
Joaquim Machado de Assis
La invención de la cámara cambió el modo de ver de los hombres. Lo visible llegó a significar algo muy distinto para ellos. Y esto se reflejó inmediatamente en la pintura.
John Berger
El viaje no termina jamás. Solo los viajeros terminan. Y también ellos pueden subsistir en memoria, en recuerdo, en narración... El objetivo de un viaje es sólo el inicio de otro viaje.
José Saramago
Puedes decidir qué tipo de rey querrás ser.
Lupita Nyong'o
Nuestro amor es como el viento, no puedo verlo, pero si sentirlo.
Mandy Moore
Al final, la gente que sufre tiene que ‘querer’ seguir adelante, que el primer paso, esa chispa de motivación, tiene que salir de ellos. Y cuando lo hace, abre la puerta a lo inesperado.
Nicholas Sparks
Quien adelante no mira, atrás se queda.
Proverbio
Estoy en una racha increíble. Uno siempre se espera una derrota de vez en cuando. Por eso, cuando sucede, ¿por qué decepcionarme si gano más del 90% de mis partidos?
Roger Federer
El saber, en ocasiones, nos acobarda.
Sandra Barneda
Las dudas y los celos suelen engendrar los hechos que temen.
Thomas Jefferson
Más vale estar entre los muertos a quienes nosotros, para hacernos lugar, hemos enviado a gozar de la paz eterna, que yacer en un éxtasis sin descanso torturando nuestra mente.
William Shakespeare