La mujer más que salir de la costilla de Adán emergió de su sueño de amor.
Efraín Gutiérrez Zambrano
Sin música hubiera sido muy muy difícil sobrevivir.
Demi Lovato
El que te habla de los defectos de los demás, con los demás hablará de los tuyos.
Denis Diderot
Las utopías fenecidas. ¡Qué tiempos, cuando aún podías cuidarlas y mimarlas!
Elias Canetti
La felicidad del hombre acá abajo no es más que un estado negativo; debe medírsela por la menor cantidad de males a que esté sujeto.
Jean-Jacques Rousseau
Para mí la clave de la libertad es la libertad de pensamiento. Se habla mucho de la libertad de expresión. Hay que reivindicar la libertad de expresión, por ejemplo en la prensa, pero si lo que usted expresa en la prensa es un pensamiento que no es propio, que ha adquirido sin convicción y sin pensarlo, entonces no es usted libre por mucho que le dejen expresarse.
José Luis Sampedro
Solamente Rusia que es un país de esencia terrestre ha podido aceptar ser marxista por mas de 50 años, porque su población no tiene la dinámica de la población chilena que nació junto al mar, porque su población es semivegetal.
José Toribio Merino
La altura, como igualdad, no existe; sólo como supremacía.
Marina Tsvetáyeva
Nadie viene a Nueva York y se va si no le ha pasado algo horrible.
Mark Ruffalo
La alimentación y la agricultura son el frente y la espalda de un mismo cuerpo.
Masanobu Fukuoka
No todas las verdades han de salir en público, ni a los ojos de todos.
Miguel de Cervantes
Estoy devanándome los sesos intentando encontrar algún medio de evitar la catástrofe, si es que está en nuestra mano, y se me ha ocurrido una idea tan poco convencional que he dejado a Halifax sin respiración...
Neville Chamberlain
Donde hay dolor, allí hay tierrasanta.
Oscar Wilde
La Dirección única ha sido excluyente y antidemócratica, debe elegirse una dirección colegiada en la que estemos representados todos los sectores y tendencias liberales.
Piedad Córdoba
Encuenra un amigo y ascenderás un peldaño.
Talmud
Los que juegan diestramente con las palabras, pronto las hacen livianas.
William Shakespeare