La paz comienza justamente donde la ambición termina.
Edward Young
El mundo moderno, al dar rienda suelta a la emoción sólo ha conseguido vulgarizarla. Lo que necesitamos es el dominio clásico.
Agustín Acosta
Los hombres tienen necesidad de ser amados para ser felices y de ser más o menos poderosos para ser amados.
André Maurois
Los hombres tienden a plantear sus deseos ante quienes consideran que es milagrosamente superior a ellos, por una vía de fe o por otra.
Cándido
Si uno estudia la historia de la deuda, lo primero que advierte es una profunda confusiónmoral.
David Graeber
En la tranquilidad hay salud, como plenitud, dentro de uno. Perdónate, acéptate, reconócete y ámate. Recuerda que tienes que vivir contigo mismo por la eternidad.
Facundo Cabral
Un político es más grande cuanto más a menudo se contradice.
Friedrich Dürrenmatt
Feliz aquel que ni piensa en el suicidio ni desea la muerte. Feliz aquel en cuyo corazón anida la llama del entusiasmo. Y eterno sea quien trabaje o se prepare sinceramente para el trabajo.
Naguib Mahfuz
La envidia es una declaración de inferioridad.
Napoleón Bonaparte
La uniformidad mata el amor; desde que el espíritu de orden se apodera de un asunto de amor; desaparece la pasión, a ésta sucede la languidez, asoma el fastidio y el disgusto termina todo.
Ninon de Lenclos
Que este aire sea testigo de su corazón de largo alcance, y en las trincheras, un omnívoro y activo océano sin ventana es la materia... ¿De qué sirven estas estrellas delatoras? Todo deben contemplar ¿Para qué? En la reprobación del juez y del testigo, en un océano sin ventana, está la materia.
Ósip Mandelshtam
Un matemático es una máquina para transformar café en teoremas.
Paul Erdős
Seriamente, en tus ojos era la mar dos niños que me espiaban, temerosos de lazos y palabras duras.
Rafael Alberti
Además, para educar un público hay que comenzar por tenerlo, y para tenerlo hay que halagarlo. ¿O es que te resignas a ser el único suscriptor? Un gran diario, es decir, un diario con un gran público, es un partido; cada vintén representa un voto. Y se trata de electores que dan su voto y dinero encima: ninguna política consigue tanto.
Rafael Barrett
Cuando se tiene menos estima del objeto amado que de si mismo, no se tiene por él más que un simple cariño cuando se le estima igual que a sí, ahí está la amistad, y cuando se le estima más, a esa pasión la podemos llamar devoción.
René Descartes
Las personas que entregan su alma y su destino a la soledad no tienen fe. Sólo esperan. Esperan el día o la hora en que puedan dilucidar todo lo que les ha conducido a la soledad con las personas que son responsables de ello.
Sándor Márai