Los mejores no siempre son los más felices, pero los más felices suelen ser los mejores.
Edward Bulwer-Lytton
Perfecta es la humildad de aquel que nunca olvida que la luz viene de lo alto y no de él, y que no viene sólo para él, sino para toda sombra y toda pena.
Alberto Masferrer
El temor a hacer bajezas e indignidades es valor, y es valor también saberlas sufrir cuando se nos hacen a nosotros.
Ben Jonson
Hoy surgen muchos falsos ídolos. Si los cristianos desean ser fieles, no han de temer ir contracorriente.
Benedicto XVI
El combate determina todo cuanto se refiere a las armas y los equipos, y éstos a su vez modifican la esencia del combate. En consecuencia, existe una relación recíproca entre unos y otro.
Carl von Clausewitz
Todos los esfuerzos del mundo no importan si no estas inspirado.
Chuck Palahniuk
La necesidad esta dentro del mal, pero no hay causa, dianoética, alguna de vivir con necesidad.
Epicuro
La audacia es mala guardadora de promesas.
Francis Bacon
Si el vaso no está limpio, lo que en él derrames se corromperá.
Horacio
El secreto de hablar el francés es la confianza. Ya sea que usted hable bien o mal, no dude.
Joseph Epstein
Mi única y humildeverdad era un odio insuperable a la estupidez y a la crueldad; es decir, una aversión natural al único pecado que para mí existe, el pecado contra la inteligencia, el pecado contra el EspírituSanto.
Manuel Chaves Nogales
Con mucha sabiduría, en el siglo XIX los políticos se dividían en moderados y exaltados. Entonces estaba claro que el destino de una sociedad dependía del carácter de sus gobernantes. Después de todo, un político, un juez, un obispo o un militar traslada al ejercicio del cargo las mismas pasiones que utiliza para jugar al tute o a la garrafina.
Manuel Vicent
Pienso con frecuencia en esta imagen que sólo yo sigo viendo y de la que nunca he hablado.
Marguerite Duras
Ya había muerto, pero seguía caliente, caliente... No se lo podía tocar...
Svetlana Alexijevich
Me gusta hablar en la televisión sobre las cosas que no me gusta escribir.
Truman Capote
El juramento de un enamorado no tiene más fuerza que la palabra de un mozo de cervecería. Uno y otro no sirven sino para confirmar o certificar cuentas falsas.
William Shakespeare