Escucha. Hay un universal maravilloso pasando esa puerta. Vamos.
E. E. Cummings
No existe la guerra inevitable. Si llega, es por fallo del hombre.
Andrew Bonar Law
Pensamos que la oración es algo intimista. Ya no creemos tanto, según me parece, en el efecto real, histórico de la oración.
Benedicto XVI
Quiero decir, con toda seriedad, que la fe en las virtudes del trabajo está haciendo mucho daño en el mundo moderno, y que el camino hacia la felicidad y la prosperidad pasa por una reducción organizada de aquél.
Bertrand Russell
Hitler habla durante dos horas. Me siento abatido. ¿Qué Hitler es éste? ¿Un reaccionario? Fabulosamente torpe e inseguro. Ya no creo ciegamente en él. Esto es lo terrible: he perdido el apoyo interior. Sólo soy a medias.
Joseph Goebbels
Mamá se sujetaba ambas manos, apretándolas, y unas lágrimas limpias empezaban a rodarle por las mejillas. Mirándola, José quiso consolarla: esa es la guerra, doña; no hay remedio... O se mata o lo matan. Pero esas palabras ni a él le satisfacían porque bien claro se le veía el dolor.
Juan Bosch
La belleza es la expresión estética del amor.
Lindsay Kemp
Me equivoco, pero siempre me equivoco porque no sé, pero no porque no hice.
Marcelo Bielsa
¿Quién roba más que nuestros financieros?
Marqués de Sade
La muerte despoja a la vida de toda seriedad.
Paul Valéry
Escoge a una mujer de la cual puedas decir: hubiera podido escogerla más bella, pero no mejor.
Pitágoras
El mundo no está lleno de problemas, ¡son las mentes las que están llenas de problemas!
Raimon Samsó
La literatura de cienciaficción es la crónica más fiel de nuestros tiempos y a veces también una guía premonitoria del futuro.
René Rebetez
La música es pasión, amor y nostalgia.
Richard Wagner
Al volver del trabajo debes sentir la satisfacción que ese trabajo te da y sentir también que el mundo necesita ese trabajo. Con esto, la vida es el cielo, o lo más cercano al cielo. Sin esto-con un trabajo que desprecias, que te aburre y que el mundo no necesita-la vida es un infierno.
William Edward Burghardt Du Bois
Si nuestro país fuera derrotado, desearía que encontráramos un campeón tan indomable como el señor Hitler para restaurar nuestro coraje y conducirnos otra vez al lugar que nos corresponde entre las naciones.
Winston Churchill