El mundo está lleno de personas que buscan la felicidad espectacular mientras ignoran la satisfacción.
Doug Larson
Una sonrisa es la semilla que crece en el corazón y florece en los labios.
Anónimo
Las ciudades de todo el planeta están llenas de gente que va de un lugar a otro en vuelos baratos para comprar las mismas prendas que a diario puede ver expuestas en los comercios de la calle donde vive.
Arturo Pérez-Reverte
Había mujeres tan fuertes que nada podía quebrarlas. Vencerlas sí, pero quebrarlas, nunca.
Camilla Läckberg
Comer es una necesidad del estómago; Beber es una necesidad del alma.
Claude Tillier
El concepto de progreso actúa como un mecanismo de protección destinado a defendernos de los terrores del futuro.
Frank Herbert
Cada uno de nostros es su propio clima, determina el color del cielo dentro del universo emocional en el que habita.
Fulton John Sheen
Las palabras de la Escritura no están constreñidas a obligaciones tan severas como los efectos de la naturaleza, y Dios no se revela de modo menos excelente en los efectos de la naturaleza que en las palabras sagradas de las Escrituras.
Galileo Galilei
No tengo miedo a los ordenadores. A lo que tengo miedo es a la falta de ellos.
Isaac Asimov
Maravillosa libertad la de Dios, que paga con largueza, si se lo devolvemos, aquello mismo que Él nos ha regalado.
Juan Luis Vives
Una cólera verdadera brota cuando sentimos que parientes o amigos bien intencionados interfieren en un nivel que impide la continuación de nuestro arte: reaccionamos como si se tratara de un asunto de vida o muerte y en verdad lo es.
Julia Cameron
Luchamos por ideales de felicidad para todos, no por encumbrar a nadie sobre nuestras espaldas.
Librado Rivera
Las maravillas del mundo nunca son pocas, lo que siempre falta es la capacidad de sentir y admirar.
Mário Quintana
Temblor de cristales: escalofrío de la casa.
Ramón Gómez de la Serna
Ahora debo callar, ya que no me queda fuerza suficiente contra tanto mal.
Salvador Espriu
Hay que saber que no existe país sobre la tierra donde el amor no haya convertido a los amantes en poetas.
Voltaire