La generosidad humana es un reflejo del amor de Dios.
Doménico Cieri Estrada
Sed amables con los forasteros, ya sea que provengan de Turquía, Japón, Persia, Rusia, China o de cualquier otro país del mundo. Ayudadles a que se sientan como en su propia casa, y procurad que sus vidas sean un poco más agradables. Pues esta bondad ayudará a que sean mejores.
Abdu'l-Bahá
No se trata de renunciar a lo que uno es: es aceptar la parte en la que nos parecemos a otros, lo que tenemos en común que nos constituye tanto como lo que nos diferencia.
Antonio Muñoz Molina
Quien, aunque fuera una sola vez, amó y fue amado de verdad, por miserable que sea su vida ulterior, no debe maldecir demasiado del destino.
Arturo Graf
De Itabira traje prendas diversas que ahora te ofrezco: este San Benito del viejo santero Alfredo Duval; esta piedra de hierro, futuro acero del Brasil; este cuero de anta, extendido en el sofá de la sala de visitas; este orgullo, esta cabeza baja...
Carlos Drummond de Andrade
Son sólo los ojos los que vuelven ciego al hombre.
David Carradine
Hay hombres que tienen la cabeza abajo, como las plantas, y que miran con los pies, tal fue la conclusión de nuestra conversación sobre la inteligencia y tuvimos la impresión de escapar durante algunos minutos de la locura de los hombres que comprenden y explican...
Francis Picabia
Correcta o incorrecta ésta es mi película, ésta es mi decisión, y ésta es mi visión creativa, y si a la gente no le gusta, no tiene que verla.
George Lucas
En esta lucha revolucionaria no hay modelos, no hay recetas, simplemente una pregunta terriblemente urgente. No una pregunta vacía, sino una pregunta llena de mil respuestas.
John Holloway
Un buen consejo lo aceptaría aunque viniera del diablo.
Juan Bosco
El poder tiende a corromper, el poder absoluto corrompe absolutamente.
Lord Acton
Un artista no tiene necesidad de expresar directamente su pensamiento en la obra para que ésta refleje la calidad de aquél.
Marcel Proust
Queremos triunfar y divertirnos a la vez.
Michael Dell
Nunca será un mundo perfecto mientras haya gente en él.
Peter David
El verdadero nombre de la religión es muerte. Jesús murió; Asclepio murió. En el sur de Francia mataron a los cátaros por decenas de millares. En la guerra de los Treinta Años centenares de millares de personas murieron, protestantes y católicos, en una mutua carnicería. La muerte es su verdadero nombre; no Dios, no el Salvador, no amor: muerte.
Philip K. Dick
Las cosas que nos ocurren, incluso las malas, pueden enseñarnos algo sobre nosotros mismos.
R. J. Palacio