Otros perros sólo muerden a sus enemigos, mientras que yo también muerdo a mis amigos con el fin de salvarlos.
Diógenes
Hay un placer que nada puede igualar: la ilusión de tener un sentido.
Amélie Nothomb
La risa es copiosa en la boca de los necios.
Anónimo
Sobre España: este paraje ingrato, envidioso y miserable, históricamente enfermo. De esta ruin madrastra y sus turbios, desvergonzados, impunes secuaces.
Arturo Pérez-Reverte
Una de las obsesiones de los dibujantes era lograr la síntesis. Tener un mono que sea dos puntos y una nariz y que el lector diga, esta es una persona.
Caloi
A nadie se le puede convencer de verdad de lo que no necesita creer.
Carlos Ruiz Zafón
En su compañía jamás gocé de una sola hora de felicidad, y, sin embargo, durante las veinticuatro horas del día no pensaba más que en tenerla a mi lado hasta la hora de mi muerte.
Charles Dickens
Hay muchas maneras de tocar blues, pero siempre será blues.
Count Basie
Existe una tentación extremadamente sutil y peligrosa de confundir la paz con la simple ausencia de guerra, como estar tentados de confundir la salud con la ausencia de enfermedad, o la libertad con el no estar preso. La terminología es a veces engañosa. Por ejemplo, la expresión "coexistencia pacífica" significa ausencia de guerra y no verdadera paz.
Dominique Pire
Los celos son el amor propio de la carne.
Etienne Rey
La vida es un ejercicio de autogobierno.
George Santayana
Ignorancia pluralista es el concepto de que las personas aceptan algo porque asumen que el resto está de acuerdo. La ignorancia pluralista conduce luego al conservadurismo colectivo o la reticencia al cambio. ¡Eso sí que es una espiral descendente!
Guy Kawasaki
La verdad, sino es entera, se convierte en aliada de lo falso.
Javier Sádaba
La política es una casa de putas en la que las pupilas son bastante feas.
Marlene Dietrich
Mi Atenea cuéntale a mi azotea como lleva eso del crear, eso del cagar y el mear.
Rapsusklei
Siempre me ha gustado no dar golpe. Y hubiera descansado también los días laborables de haber podido. No es que fuera decididamente perezoso. Era algo distinto.
Samuel Beckett