Frase de Diego Fortea

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Cuando uno disfruta haciendo algo, esa misma sensación se disipa por la atmósfera como un eructo de esporas. Y la gente, que no es tont... - Diego Fortea

Cuando uno disfruta haciendo algo, esa misma sensación se disipa por la atmósfera como un eructo de esporas. Y la gente, que no es tonta, lo nota.

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Entonces, como no estudiaba nada, aprendía mucho.

Tenemos que preocuparnos menos de lo que piensen los demás, de cotilleos y de gente que no tiene nada más que hacer en la vida que criticar al resto de la humanidad.

Jesús es el único contenido. Al lado de Jesús no hay otro contenido. El mismo es el contenido.

Dietrich Bonhoeffer

Una cantidad de interferencias en el buen funcionamiento de la economía como el de la compra de dólares, imagínese en un momento en que hay abundancia de dólares en todo el mundo, aquí porque han creado un clima de desconfianza la gente se ve restringida de poder proteger sus ahorros.

Domingo Cavallo

El cuerpo, en lances de amor, es parte indispensable del alma.

La lucha por la libertad es la esencia de la misma libertad.

De grado o por fuerza, se vive de lo que se niega.

Mentir bien es un arte muy difícil, que pocas personas llegan a practicar con solvencia y dignidad.

El porvenir no me inquieta; lo que es duro a veces es el presente.

Necesitamos empezar a hacernos nuevas preguntas y hay que empezar a mirar en sitios diferentes y no donde siempre hemos mirado.

Mario Alonso Puig

La materia es impotente, inerte, pasiva, sólo el espíritu es activo, mueve a los materialistas mismos que le niegan. No hay absurdo mayor que fundar su actividad en una doctrina materialista. Es el ser el que manda a la conciencia, y no la conciencia la que manda al ser, que es, ante todo, espíritu y no materia, y ésta no depende más que de la conciencia.

Nikolái Berdiáyev

Todos los niños nacen artistas. El problema es cómo seguir siendo artistas al crecer.

Si perdonas una falta, animas a que se cometan muchas más.

Hay pocas ideas en las Universidades (hay pocas ideas en todos lados, Wittgenstein tuvo dos en toda su vida) pero todos creen que eso que piensan es una idea. Ideas pocas, hipótesis originales escasísimas, oro fino; el robo es el fantasma que recorre las universidades europeas (y no solo europeas).

Muchos que quisieron traer luz, fueron colgados de un farol.

Stanisław Jerzy Lec

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