Intentar vencella la envidia con los beneficios o con el rigor es imprudente empresa.
Diego de Saavedra Fajardo
Tengo que decir que estoy a favor de la flagelación pública. Para un tipo de criminal para el que esta humillación podría funcionar particularmente bien es el delincuente juvenil, muchos de los cuales consideran un honor el ser enviados a un correccional de menores. Y no sería algo tan 'suave' el ser flagelado públicamente.
Ann Coulter
Dos extremos: excluir la razón y no admitir más que la razón.
Blaise Pascal
Adelante, caminante.
Cantinflas
Al decirte que estoy enamorada de ti, lo que en realidad quiero confesarte es que ya no me gusta esta vida de burdel. Quiero que me lleves contigo.
Daniel Sada
Es el amor que da en lugar de recibir, el amor que se empequeñece en vez de ocupar todo el espacio, el amor que desea el bien del otro antes que el suyo propio, el amor liberado del ego.
Emmanuel Carrère
Comprendemos la Naturaleza resistiéndola.
Gaston Bachelard
En todos los grandes hombres de ciencia existe el soplo de la fantasía.
Giovanni Papini
Trabajo sin equipo, sin secretaria, sin diseño por computadora. Ni siquiera tengo un teléfono celular. Es un negocio muy pequeño: solo yo.
Glenn Murcutt
Quiero mezclar mi duelo con el duelo de la naturaleza.
Jacques Delille
Puede buscar un científico, que sabe lo que está buscando. Pero el creador no puede buscar algo que no conoce.
Pérez Celis
Es evidente que las leyes escritas no se parecen, ni por el forro, a las leyes naturales. ¡Valiente majestad la de esos pergaminos viejos que cualquier revolución quema en la plaza pública aventando las cenizas para siempre! Una ley que necesita del gendarme usurpa el nombre de ley. No es tal ley: es una mentira odiosa.
Rafael Barrett
Con el buen vecino, familiaridad en su casa; con el malo, en la calle.
Ramon Llull
En mi tierra, cuando se bromea, se dice algo y después se ríe ruidosamente, para que todos participen de la broma. Guillermo, en cambio, sólo reía cuando decía cosas serias, y se mantenía muy serio cuando se suponía que estaba bromeando.
Umberto Eco
No pidas ni des prestado a nadie, pues el prestar hace perder a un tiempo el dinero y al amigo.
William Shakespeare
Nadie ha medido jamás... todo lo que puede guardar el corazón.
Zelda Sayre Fitzgerald