No busco la identificación con el personaje, sino algo más complejo llamado comprensión, aceptación, respeto.
David Trueba
Ser todo tuyo... Intimidad divina... No son palabras, ni ficción o juego, sino lucha interior que a sangre y fuego se traba, y sólo con morir termina. O muere el propio amor, o lenta y triste se alarga de por vida la contienda, hasta que el alma a costa suya entienda que a tu exigencia en vano se resiste.
Aurelio Espinosa Pólit
En Alcatraz pasé miedo sobre todo de noche. Cuando hice lo de Alcatraz me engañaron. Me dijeron que sólo había tiburones grises y luego vi desde un helicóptero cómo soltaban un trozo de carne y saltaban a por él tiburones blancos de varios metros.
David Meca
Y hoy que los huesos crujen por las humedades, tu sonrisa inolvidable me hizo tanto, tanto bien.
Fito Páez
Hay libros que pueden probarse y otros que se pueden tragar. Sólo algunos merecen ser masticados y digeridos.
Francis Bacon
Para ser un hombre superior en los negocios no se trata de adquirir cualidades, sólo se trata de perder algunas.
François-René de Chateaubriand
Nuestras facultades son tan limitadas, que siempre creemos tener razón.
Goethe
Debemos renunciar a nuestra existencia para existir verdaderamente.
Mi primo canaliza en el trabajo su energía sexual. En el aserradero se ataba la sierra a la cadera.
Jacobo Winograd
Siempre quiere saber hasta dónde puede llegar.
Jean Echenoz
No hay posible concordancia entre el Occidente laico y el islam.
Juan Eslava Galán
Hacés mal en ilusionarte, yo estoy lejos de todo. Tan lejos que me da asco.
Julio Cortázar
Felices los que nada esperan, porque nunca serán defraudados.
Les Luthiers
Las demostraciones de la existencia y veracidad de Dios no hacen sino contestarla, afirmando la racionalidad del conocimiento, la posibilidad del conocimiento, la confianza postrera que hemos de tener.
René Descartes
¿Confiesa que ha vivido? -Bueno, sigo vivo, sigo leyendo, sigo escribiendo y viendo películas, y como les dijo Arturo Prat a los suicidas de la Esmeralda, mientras yo viva, esta bandera no se arriará.
Roberto Bolaño
¡Terrible cosa, la felicidad! Creemos que con ella nos basta; y una vez en posesión de esta falsa meta de la vida, que es la felicidad, olvidamos el fin verdadero: el deber.
Victor Hugo