Cuando la gente está a gusto es cuando mejor trabaja.
Daniel Goleman
Antes de volver a entrevistarme con Franco prefiero que me arranquen las muelas.
Adolf Hitler
Más vale sembrar una cosecha nueva, que llorar la que se perdió.
Alejandro Casona
¡MelancolÃa, gusto amargo de infelices, delicioso punzar de acerbo espino, que me estás atravesando lo Ãntimo del pecho con un dolor que dilacera los senos del alma! ¡Dolor, sin embargo, que lleva consigo muchos placeres!
Almeida Garrett
Lo más hermoso de Florencia es el restaurante McDonald's.
Andy Warhol
Contenta Isidora de esto, comprendió cuánto influye en la formación del carácter del hombre el ambiente que respira, las personas con quienes tiene roce, la ropa que viste y hasta el arte que disfruta y paladea.
Benito Pérez Galdós
El hombre es el vencedor de las quimeras, la novedad de mañana, la regularidad de la que el caos se queja, el tema de la conciliación.
Conde de Lautréamont
La función intelectual de las dificultades es la de conducir a hombres y mujeres a pensar.
John Dewey
No he logrado nada solo. Millones de personas en todo el mundo ansiaban la paz. Por eso digo que no hay que minusvalorar el poder de la oración.
Kofi Annan
Los crÃticos nunca acaban de enterarse de que el mundo gira sobre unas pocas docenas de frases hechas. Nos pasamos la vida repitiéndonos.
Leon Uris
Yo estaba muy metida en el baile, daba seis clases a la semana, y mi verdadero sueño era estar en un espectáculo de Broadway.
Natalie Portman
Si él cree que el tiempo ha seguido su curso, Un hombre es una cosa triste también.
Primo Levi
Tus ojos son un delito negro como las tinieblas, y tienes para ocultarlo bosque de pestañas negras.
Salvador Rueda
Una idea central detrás de nuestros ambientes de aprendizaje era que los niños fueran capaces de utilizar ideas poderosas tomadas de la matemática y la ciencia como instrumentos de poder personal...
Seymour Papert
La raiz de la libertad se encuentra en la razon. No hay libertad sino en la verdad.
Tomás de Aquino
Una de las cosas más tristes es que lo único que un hombre puede hacer durante ocho horas, dÃa tras dÃa, es trabajar. No se puede comer ocho horas, ni beber ocho horas diarias, ni hacer el amor ocho horas... lo único que se puede hacer durante ocho horas es trabajar. Y esa es la razón de que el hombre se haga tan desdichado e infeliz a sà mismo y a todos los demás.
William Faulkner