Ellos aman a sus próximos como a sà mismo, y tienen una habla la más dulce del mundo, y mansa y siempre con risa.
Cristóbal Colón
Sabemos quienes son los maniáticos homicidas. Son los que están bailando y cantando ahora. DebÃamos invadir sus paÃses, matar a sus lÃderes y convertirlos al cristianismo. No éramos tan escrupulosos cuando buscábamos a Hitler y su alta oficialidad. Bombardeábamos ciudades enteras, matábamos civiles entonces. Asà es la guerra. Y esto es una guerra.
Ann Coulter
La rebeldÃa es el único refugio digno de la inteligencia frente a la imbecilidad.
Arturo Pérez-Reverte
La filosofÃa social debe, pues, en todos los aspectos, ser preparada por la natural propiamente dicha, primero inorgánica y después orgánica.
Auguste Comte
La poesÃa sigue proyectando su luz mortal y lacrimógena; luz vivificante del devenir humano dentro de sà mismo y no orientado hacia la conquista de nuevos metales cuya fusión dosificada estalle asolando tierras de cultura, tesoros anÃmicos penosamente acumulados, segando el más preciado, el más rutilante de los tesoros: la vida humana.
César Moro
Patriotismo es cuando el amor por tu propio pueblo es lo primero; nacionalismo, cuando el odio por los demás es lo primero.
Charles de Gaulle
Voy a vencer a Hakkinen.
Eddie Irvine
En medio de lo impersonal personificado, aquà hay una personalidad. Aunque sólo un punto, como máximo: de donde quiera que haya venido; a donde quiera que vaya; pero mientras vivo terrenalmente, esa personalidad, como una reina, vive en mÃ, y siente sus reales derechos.
Herman Melville
La desnudez hace que te vuelvas vulnerable. No se deberÃa mentir cuando no se tiene la ropa puesta.
Javier Castillo
Yo ando buscando una mujer tan puta como yo.
JoaquÃn Sabina
No es necesario que haya amor en un libro para que nos encante, pero sà es necesario que haya mucha ternura.
Joseph Joubert
No hay cosa que más se parezca a la inconsciencia que la indiscreción.
Oscar Wilde
La moda es la última piel de la civilización.
Paco Rabanne
Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes y mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores: la experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan. La historia parece asà como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de todas las otras cosas.
Rodolfo Walsh
Seguramente fue el diablo quien enseñó a bailar a las mujeres.
Thomas Fuller
Quiero sobrevivir a una avalancha. Quiero ser una de esas personas encontradas por perros bajo una tonelada de nieve, a punto de morir.
Tré Cool