El matrimonio es la escuela segura del orden, de la bondad, de la humanidad, que son cualidades mucho más necesarias que la instrucción y el talento.
Conde de Mirabeau
No tengo una sola parte de mi cuerpo, por lo menos enfrente, que no tenga cicatrices; no hay arma, que se use de cerca, o que se lance desde lejos, de la cual no lleve la marca. Más aún, he sido herido por la espada, mano a mano; con flechas, he sido herido desde una catapulta y muchas veces he sido golpeado con piedras y garrotes.
Alejandro Magno
Os espero el día 20 por la noche en Valencia, champán y mujeres.
Alfonso Rus Terol
Todos los mortales andan en busca de la felicidad, señal de que ninguno la tiene. Ninguno vive contento con su suerte.
Baltasar Gracián
La enorme multiplicación de libros en todas las ramas de conocimientos es una de las más grandes plagas de esta edad, porque es uno de los más serios obstáculos para la adquisición de cualquier conocimiento positivo.
Edgar Allan Poe
Su sonrisa fue un modo de llorar con bondad.
Gabriela Mistral
Una película nunca se termina, sólo se abandona.
George Lucas
Hay quienes se consideran perfectos, pero es sólo porque exigen menos de sí mismos.
Hermann Hesse
El secreto de un matrimonio feliz es encontrar a la persona correcta. Sabes que tienen la razón si te encanta estar con ellos todo el tiempo.
Julia Child
Si la técnica no es de interés para un escritor, dudo que el escritor sea un artista.
Marianne Moore
Un mercado libre como el alabado por los utilitaristas, basado en el reconocimiento de todos los títulos de propiedad actualmente existentes, es nulo y éticamente nihilista.
Murray Rothbard
Veo el bien y no lo hago, pero hago el mal que no quiero.
Pablo de Tarso
Un guerrero acepta la derrota como una derrota, sin intentar transformarla en victoria.
Paulo Coelho
Puedes juzgar tu edad con la cantidad de temor que sientes cuando te topas con una nueva idea.
Pearl S. Buck
¿Por qué cuando vamos a pedir los gemelos de teatro al compañero de palco es cuando él se los lleva a los ojos? Porque ha visto a la misma mujer.
Ramón Gómez de la Serna
No busques al amigo para matar las horas, sino búscale con horas para vivir.
Yibrán Jalil Yibrán