Hubo un momento grande, parado, sin nada dentro.
Clarice Lispector
La cocina no la puedes separar de la persona que la hace ni del lugar donde la consumes.
Alain Ducasse
Lo que hoy se conoce como políticos, cardenal, papa, prensa e ideólogos no son otra cosa más que los mayordomos de la clase dominante.
Alex Pimentel
Los hombres no se perturban por las cosas, sino por la opinión que tienen de éstas.
Epicteto
La costumbre es falaz y nuestros pasos mecánicos no nos conducen siempre a la misma realidad.
Ernesto Sabato
Cómo pretendes que otro guarde tu secreto si tú mismo, al confiárselo, no lo has sabido guardar.
François de La Rochefoucauld
A la mujer le gusta creer que el amor puede lograr cualquier cosa; es su superstición personal.
Friedrich Nietzsche
No es justo que viva de la caridad de otros quien puede bastarse a sí mismo.
Juan Bosco
La luna olvidada espera en la ventana del cielo abierta a la tarde.
Juan Cunha
Kirchner es un tipo desagradable, desagradable, un demagogo, no parece o no tiene las ideas claras.
Mario Vargas Llosa
Alrededor del arte hay mucha mentira. Se dice hay que sentir el arte. No. Hay que estudiar. Mientras que más estudias, tu sensibilidad va a ser más refinada, más culta.
Marta Zatonyi
El Estado es la única organización que obtiene sus ingresos, no a través de contribuciones voluntarias o el pago por servicios prestados, sino a través de la coerción. El Estado obtiene su renta mediante el uso de la compulsión, es decir, la amenaza de la cárcel y la bayoneta.
Murray Rothbard
Tú sabes que estás creando tu propio mundo y que tienes un poder infinito para crearlo tal como lo desees.
Shakti Gawain
Hijo mío, atiende con placer tus negocios durante el día, pero emprende sólo los que te permitan dormir tranquilo durante la noche.
Thomas Mann
Las pasiones son al gusto lo que el hambre canina al apetito.
Voltaire
La fuerza de sustentación de un puente no es la resistencia media de los pilares, pero la fuerza del pilar más débil. Siempre he creído que no se mide la salud de una sociedad por el PNB, sino por la condición de su peor situación.
Zygmunt Bauman