¿No sería un consuelo dejar de mentir y por fin descansar?
Claire Danes
En la política es a veces como en la gramática: un error en el que todos incurren finalmente es reconocido como regla.
André Malraux
Quien lucha, puede perder; quien no lucha, ya perdió.
Anónimo
Por otro lado, lo que me gusta hacer de mi música es despertar los fantasmas dentro de mí. No los demonios, pero si los fantasmas.
David Bowie
El matrimonio es tratar de solucionar entre los dos problemas que nunca hubieran surgido al estar solo.
Eddie Cantor
No está en manos de nosotros los mortales mandar en el éxito; pero podemos hacer más, Sempronio: merecerlo.
Joseph Addison
En el fútbol juega la fuerza, la inteligencia y la picardía sana del jugador.
Mágico González
La lealtad se puede comparar con una tienda de valiosísimos jarrones de porcelana cuya llave nos ha confiado el amor.
Paulo Coelho
Las disensiones de los pueblos hacen abusivo el poder de los príncipes.
Ramon Llull
La medicina es ciencia social, y la política no es otra cosa que medicina en gran escala.
Rudolf Virchow
En el buen periodismo, además de la descripción de un acontecimiento, tenéis también la explicación de por qué ha sucedido; en el mal periodismo, en cambio, encontramos sólo la descripción, sin ninguna conexión o referencia al contexto histórico.
Ryszard Kapuściński
Con buena suerte hemos nacido si no la malogramos.
Séneca
Ninguna cosa, por pequeña que sea, pasará sin mérito a la vista de Dios, siempre que se lleva por Dios.
Tomás de Kempis
El ordenador no es una máquina inteligente que ayuda a gente estúpida, de hecho, es una estúpida máquina que funciona sólo en manos de gente inteligente.
Umberto Eco
Adiós, corazón amante, ya me voy a padecer. Dile al cielo que no muera ay, hasta que te vuelva a ver.
Violeta Parra
Compraba las colinas con baluartes, con el pecho de las palomas, con el anca de las terneras. Comparaba las flores con el esmalte, el césped a las alfombras turcas adelgazadas por el uso. Los árboles eran brujas decrépitas, las ovejas peñas grises. Cada en cosa, efecto, era otra cosa.
Virginia Woolf