Nada más opuesto a la justicia que la violencia.
Cicerón
Yo quería arremeter contra la vanidad, porque había descubierto que es incompatible con la dicha.
Adolfo Bioy Casares
Si quieres oír cantar a tu alma, haz el silencio a tu alrededor.
Arturo Graf
Así como existe un arte de bien hablar, existe también el arte de bien escuchar.
Epicteto
No neguemos nada; no afirmemos nada; esperemos.
Ernest Renan
Más de uno de nuestros sabios corrientes hubiera podido ser un gran hombre si no hubiese leído tanto.
Georg Christoph Lichtenberg
En las cosas cruciales hay que tener unidad, en las cosas importantes hay que tener diversidad.
George Bush
Mi nombre no es beatle John. Es John Lennon.
John Lennon
Sólo hizo falta un instante para cortar su cabeza, pero es poco probable que cien años sean suficientes para que surja una igual.
Joseph-Louis Lagrange
La seguridad y la quietud han desaparecido de la vida de los hombres desde 1914.
Konrad Adenauer
Pienso que todo el mundo debe experimentar la derrota al menos una vez a lo largo de su carrera. Se aprende mucho de ello.
Lou Holtz
Para acostumbrarse a la muerte, no hay como acercársele.
Michel de Montaigne
Sólo hay dos palancas que muevan a los hombres: el miedo y el interés.
Napoleón Bonaparte
El hombre sabio procurará que sus actos parezcan siempre voluntarios y no forzados, por mucho que pueda obligarle la necesidad de realizarlos.
Nicolás Maquiavelo
Lo más maravilloso de mi profesión es imaginar el partido que va a suceder mañana. Con los jugadores que yo tengo, con esas herramientas que tengo, con el contrario, que se lo que hace, soñar qué va a pasar.
Pep Guardiola
Un león entre mujeres es lo más peligroso.
William Shakespeare