El español y el piano son mi perdición.
Christina Aguilera
La vida empieza cada cinco minutos.
Andreu Buenafuente
Hay muchas maneras de tocar blues, pero siempre será blues.
Count Basie
Barca, alma hermana; ¿Hacia qué tierras nunca vistas, de hondas revelaciones, de cosas imprevistas iremos? Yo ya muero de vivir y soñar...
Delmira Agustini
Aquí la eternidad que fue un instante.
Enrique Bunbury
Entre la vida y yo hay un cristal tenue. Por más claramente que vea y comprenda la vida, no puedo tocarla.
Fernando Pessoa
Hay gente que cree que todo cuanto se hace poniendo cara seria es razonable.
Georg Christoph Lichtenberg
Me recuerda a algo que mi abuelo solía decirme, el decía subiré las escaleras para tirarme a tu abuela. Él era un hombre sincero y no quería mentirle a un niño de 4 años.
George Carlin
Las computadoras personales son como los dinosaurios, destinadas a extinguirse con la llegada de internet.
Larry Ellison
Pero también no digo sino aquello que sé, o sea, aquello que oigo; los otros pierden su tiempo en ver y oír; yo como no puedo más que oír, empleo en hablar lo que lo demás emplean en ver; hablo y hablo mucho; pero qué quiere si me sobra tiempo para eso; y además, ud. sabe que no es trabajo cansador.
Manuel Antonio de Almeida
La muerte no es más que una puerta vieja colocada en la tapia de un jardín.
Nancy Byrd Turner
En vez de maldecir el lugar en el que caíste, deberías buscar aquello que te hizo resbalar.
Paulo Coelho
La autoridad es una facultad natural que confiere al que la posee el don de provocar el respeto. La autoridad es pues fuente natural de fuerza moral.
Salvador de Madariaga
E incluso si tu enemigo sufriera como deseas, ¿Cómo te beneficiaría a ti? Si me respondes: por lo menos, me sentiría satisfecho, ¿Existe, acaso, mente más infame que esta?
Shantideva
Dejad de pelear, os comportáis como los putos negros; ¿habéis trabajado con negros? Son igual que vosotros, todo el día están diciendo que se van a matar.
Steve Buscemi
Cuando la mujer perversa por naturaleza se vuelve sublime mediante la santidad, puede ser el vehículo de gracia más noble.
William Hickey