El niño no volvió a llorar, y nunca olvidó lo que había aprendido: que amar es destruir, y que ser amado es ser destruido.
Cassandra Clare
Timing es money.
André Kostolany
La riqueza del suelo entre nosotros no sólo no aumenta, sino tiende a desaparecer.
Arturo Uslar Pietri
Cuando estás en el fondo del abismo, encuentras en él un consuelo especial que no se halla en ninguna otra parte.
Banana Yoshimoto
Porque al forzarse a escribir sobre ello y ponerlo en palabras, no se puede evitar tener que luchar a brazo partido con él. Usted podría estar equivocado, pero hay que pensar muy intensamente para escribir sobre ello. Así que uso la escritura como herramienta de aprendizaje.
Hunter S. Thompson
A menudo lo que nos engaña es únicamente nuestra propia vanidad.
Jane Austen
A menudo los hijos se nos parecen, así nos dan la primera satisfacción; ésos que se menean con nuestros gestos, echando mano a cuanto hay a su alrededor.
Joan Manuel Serrat
El boxeo es una celebración de la religión perdida de la masculinidad, tanto más contundente por estar perdida.
Joyce Carol Oates
No hay ninguna filosofía de la vida que un hombre razonable no pueda fundamentar de manera convincente.
Leszek Kolakowski
Ayer lloraba el que hoy ríe, y hoy llora el que ayer rió.
Miguel de Cervantes
No hay cosa que más se parezca a la inconsciencia que la indiscreción.
Oscar Wilde
Nadie puede decir voy a hacer una obra de arte, nadie puede decir soy artista. Es la permanencia en el tiempo lo que hará que esa obra posiblemente sea una obra de arte.
Pérez Celis
La verdadera amistad busca tres cosas: la virtud, por honesta; el diálogo, como deleite; y la utilidad, como necesidad.
Plutarco
Hay algo en la esencia de los pueblos que resulta persistente: lo cósmico y lo terrígeno. El negro, el indígena, el hombre antiguo encarnan conceptos que no coinciden con la mentalidad occidental, pero eso no puede dar pábulo para descartar herencias que pertenecen a la composición natural de nuestras raíces.
René Rebetez
El cerebro no es del todo como un ordenador sino más bien como un ordenador que está cambiando contínuamente.
Roger Penrose
La sabiduría compensa cualquier riqueza.
Sófocles