No hablaba de Grecia como una sucesión de fechas y héroes si no se refería a la vida cotidiana de las personas.
Carlos Pellicer Cámara
Cuando los hermosos ojos de una mujer se comienzan a velar con lágrimas, quien empieza a no ver claro es el hombre.
Achille Tournier
Oír con paciencia es a veces mayor caridad que dar. Muchos infelices se van más encantados de la atención con que escuchamos el relato de sus penas, que de nuestro óbolo.
Amado Nervo
Las despedidas siempre duelen, aún cuando haga tiempo que se ansíen.
Arthur Schnitzler
Amo a los objetos en la medida en que ellos no me aman.
Clarice Lispector
El amor es una ley de comportamiento con una fuerza equivalente a las leyes de la física.
Eduardo Punset
No prestéis crédito a nadie, ni a mí mismo, a no ser que las enseñanzas estén corroboradas por razones y argumentos sólidos.
Francisco Sánchez de las Brozas
Mi corazón emprende de mi cuerpo a tu cuerpo último viaje.
Jaime Sabines
Una muerte súbita no es otra cosa que una súbita alegría, siempre que sorprenda al hombre en estado y ejercicio de virtud.
Jeremy Taylor
La patria es ara, no pedestal.
José Martí
Puede ser que mi verdad sea para ti mentira. Puede ser, sí, la duda es el privilegio de quien ha vivido mucho, tal vez por eso no consigues convencerme para que acepte como certeza lo que me suena a falsedad.
José Saramago
Que al ciego efecto la razón sujeta, no ve el peligro, o, si le ve, le aceta.
Lucano
El mundo, para nosotros, es representación, como decía Schopenhauer; no es una realidad absoluta, sino un reflejo de ideas esenciales.
Pío Baroja
Podré ser conquistado, pero no capitularé.
Samuel Johnson
Nuestro ataque es como el Teorema de Pitágoras. No tiene solución.
Shaquille O'Neal
Oro y esclavos. El primero lo corrompe todo; el segundo está corrompido por sí mismo. El alma de un siervo rara vez alcanza a apreciar la sana libertad: se enfurece en los tumultos o se humilla en las cadenas.
Simón Bolívar