Un rápido y vigoroso cambio hacia la ofensiva - el relámpago de la espada vengadora - es lo que constituye los más brillantes episodios de la defensa.
Carl von Clausewitz
Donar anónimamente... Es el último y verdadero espíritu de la caridad.
Anónimo
Una canción es una experiencia: no hay necesidad de entender las palabras para entender la experiencia. Intentar entender el significado completo de las palabras puede destruir el sentimiento de la experiencia como un todo.
Bob Dylan
A quien ame al mundo como a su propio cuerpo, se le puede confiar el mundo.
Christopher McDougall
Cuando descubrimos un hecho que contradice la teoría, debemos aceptar el hecho y abandonar la teoría.
Claude Bernard
Es que para admirar se necesita grandeza, aunque parezca paradójico.
Ernesto Sabato
Se confunde a veces precisión y sopor.
Eugenio Trías
La función última de la crítica es que satisfaga la función natural de desdeñar, lo que conviene a la buena higiene del espíritu.
Fernando Pessoa
Nos acostumbramos a los defectos de los demás cuando no nos creemos obligados a corregirlos.
Françoise Sagan
Cuando hombres y mujeres se ponen de acuerdo, las conclusiones deben ser las mismas, pero los motivos diferentes.
George Santayana
Pero soy voraz con la vida. Hago demasiado de todo durante todo el tiempo. De repente, un día me fallará el corazón. El Cangrejo de Hierro me llevará como se llevó a mi padre. Pero yo no le tengo miedo al cangrejo. Al menos habré muerto de una enfermedad honorable. Tal vez, en mi lápida, inscriban: Este hombre murió a fuerza de vivir demasiado.
Ian Fleming
La felicidad no necesita ser transmutada en belleza, pero la desventura sí.
Jorge Luis Borges
Aquellas miradas que hacían estragos en los chicos; miradas implacables y seductoras, que con un imperceptible arqueo de cejas lo mismo fulminaban que perdonaban la vida.
Paolo Giordano
No estoy a favor del matrimonio entre hermanos porque como usted sabe existiría en ese caso el impedimento de consanguinidad.
Pedro Zerolo
Mejor sufre el mal quien siempre le teme.
Séneca
Por vez primera en la historia, con la fundación de los grandes almacenes, los consumidores empiezan a sentirse como masa (antes sólo se lo imponía la escasez). Con ello el elemento circense y teatral del comercio aumentará de modo extraordinario.
Walter Benjamin