Hay defectos que manifiestan un alma bella mejor que ciertas virtudes.
Cardenal de Retz
La esperanza es el mejor médico que yo conozco.
Alejandro Dumas
Ahora mismo (Alonso) es el mejor desde mi punto de vista. Está a la altura de Michael Schumacher y Alain Prost, que ganaron entre ambos once títulos.
Fernando Alonso
El hundimiento de la URSS ha roto el marxismo y el capitalismo; al final de este siglo, todo es diferente.
Gustavo Bueno
Cuando sólo tenga la eternidad para ofrecerte, una eternidad de voces y de olvido, una eternidad en la que ya no podré verte ni tocarte ni encelarte ni matarte, cuando a mí mismo ya no me responda y no tenga día ni cuerpo entonces seré tuyo entonces te amaré para siempre.
Homero Aridjis
Donde el río se queda y la luna se va donde nadie ha llegado ni puede llegar, donde juegan conmigo los versos en flor tengo un nido de plumas y un canto de amor.
Homero Expósito
Al llegar a cada nueva ciudad el viajero encuentra un pasado suyo que ya no sabía que tenía: la extrañeza de lo que no eres o no posees más te espera al paso en los lugares extraños y no poseídos.
Italo Calvino
Raro don es la justicia. Todo hombre tiene un poco de león, y quiere para sí en la vida la parte del león. Se queja de la opresión ajena; pero apenas puede oprimir, oprime. Clama contra el monopolio ajeno; pero apenas puede monopolizar, monopoliza: No en balde, cuando el libro de los hebreos quería dar nombre a un varón admirable lo llamaba un justo.
José Martí
Estoy contento de sentir, aunque suelo estar triste por sentir.
José Narosky
Yo soy diabético, es decir, dos veces bético.
Manuel Ruiz de Lopera
No nos echemos tierra a los ojos: el automóvil es una silla de ruedas.
Nicanor Parra
Y yo atrapado con los horarios y la responsabilidad. Nunca sucedía nada.
Pedro Juan Gutiérrez
Soy un libertino, pero no es mi especialidad.
Primo Levi
Una persona inteligente se repone pronto de un fracaso. Un mediocre jamás se recupera de un éxito.
Séneca
El culpable huye cuando nadie le persigue.
Stephen King
La vida no se pierde al morir; la vida se pierde minuto a minuto, se arrastra día a día, en mil pequeños descuidos.
Stephen Vincent Benet