No temas fallar. No es fallar, sino apuntar muy bajo el error. Con grandes aspiraciones, es glorioso incluso fallar.
Bruce Lee
Las ciencias de los ingenieros son aquellas que dan los modos del conocimiento en las direcciones y los métodos en la facilidad para remover los obstáculos para la invención de esta arte y su exteriorización in actu en los cuerpos físicos y sensibles.
Al-Farabi
Puede que lo que hacemos no traiga siempre la felicidad, pero si no hacemos nada, no habrá felicidad.
Albert Camus
María Santísima. La más bella criatura... Objeto toda ternura... pero su misión no es ser Ella el centro culto, sino llevarnos a Cristo y por Él al Padre...
Alberto Hurtado
A la cima no se llega superando a los demas, sino superándose a sí mismo.
Anónimo
Somos más que la suma de nuestras ambiciones individuales, y somos más que una colección de estados rojos y estados azules. Somos, y siempre seremos, los Estados Unidos de América.
Barack Obama
La alegría no es el éxtasis momentáneo, sino el resplandor que acompaña al ser.
Erich Fromm
Era una ironía increíble ir al Cielo y morir, justo al revés de como se supone que debía ser.
Fernando Trujillo Sanz
Para que la idea sea buena, hemos de estar implicados emocionalmente.
Jean Larser
¿Tendremos que repetir una vez más que es a toda costa necesario saber aprovechar las contradicciones en el campo de la burguesía y saber utilizar a los aliados que temporalmente nos brinde una situación determinada?
José Díaz Ramos
No irse: acto de confianza y amor, a menudo descifrado por los niños.
Markus Zusak
Hijo, muchas veces los adultos no tenemos la menor idea de lo que decimos.
Martin Hayter Short
Si a un oso panda ayudas, él te dará la mano.
Mateo Gil
¡Libertad para los indios donde quieran que estén en América y en el Mundo, porque mientras vivan vivirá un brillo de esperanza y un pensar original de la vida!
Rigoberta Menchú
Sexy, pero no para excitar a los hombres, que esos con cualquier cosita tienen..., sino para que una mujer se guste a sí misma y se sienta bien en su piel.
Rossy de Palma
Los actores harían bien en convertirse en jugadores de póquer.
Tom Everett Scott