Cuando volvía a Dublín fui sentenciado a muerte en mi ausencia, así que dije que me podían fusilar en mi ausencia.
Brendan Francis Behan
Voy a través de trillones de moléculas, que se corren a un lado para hacerme lugar mientras que a ambos lados, trillones más se quedan donde están. La escobilla del limpiaparabrisas comienza a chirriar. La lluvia ha parado. Yo he parado. En la esquina un chico con un impermeable amarillo agarrado de la mano de su madre.
Adam Driver
La televisión es maravillosa. No sólo nos produce dolor de cabeza, sino que además en su publicidad encontramos las pastillas que nos aliviarán.
Bette Davis
La ira es nuestro auténtico enemigo ya que se haya en nuestra mente. La ira no cambia nunca su naturaleza. Siempre hiere y destruye. Y lo que es peor, aniquila nuestras propias fuerzas y energías.
Dalai Lama
Puede decirse que es un defecto ser demasiado profundo. La verdad no siempre está dentro de un pozo.
Edgar Allan Poe
El analista debe estar atento a la palabra plena.
Jacques Lacan
Dios no hizo bien las cosas: deberíamos vivir tantas veces como los árboles, que pasado un año malo echan nuevas hojas y vuelven a empezar. Nosotros sólo una primavera, sólo un verano y al hoyo... Por eso has de echar bien tus ramas desde ahora. Yo nací en pedregal y no me quejo, llegué a enderezarme solo. Pero pude haber florecido mejor...
José Luis Sampedro
¡Es más difícil renunciar al amor que a la vida!
Louis-Ferdinand Céline
Feliz yo, que no poseo esposa.
Menandro
Este es el momento, esto es todo.
Michael Jackson
El hombre sabe que no puede abarcar su universo con su sol y sus estrellas. Lo que le parece mucho más insoportable es estar condenado a dejar pasar de largo también al otro infinito, al cercano, al que está al alcance de la mano.
Milan Kundera
El mar agita sus crines plateadas y los desiertos y las ciudades se levantan.
Nikolái Gumiliov
Si la justicia existe, tiene que ser para todos; nadie puede quedar excluido, de lo contrario ya no sería justícia.
Paul Auster
El que tenga mucho poder, úselo suavemente.
Séneca
La adversidad es escuela de la mente.
Talmud
En el crepúsculo de la memoria volveremos a reunirnos, volveremos a hablar juntos, y cantaréis para mí un canto más profundo: y si vuestras manos vuelven a encontrarse en otro sueño, construiremos otra torre en el cielo.
Yibrán Jalil Yibrán