Me estremecía. Me encendía y me apagaba. Temblaba... Propuse matrimonio, demasiado tarde; fui tímido, y me negaron. Cómo me duelen sus lágrimas ¡Me siento feliz como un santo!
Borís Pasternak
A veces estoy como en un infierno y no me lamento. No encuentro de qué lamentarme.
Antonio Porchia
Un hombre no puede cambiar el mundo pero un hombre puede comunicar el mensaje que cambiará el mundo.
David Icke
Las inteligencias medianas ceden siempre al aplomo que las fascina.
Emilia Pardo Bazán
En cualquier momento en cualquier lugar, si conseguiste hacer el amor hazlo en todos lados.
Freddie Mercury
La venganza más cruel es el desprecio de toda venganza posible.
Goethe
Nuestro barco se había rendido a toda especie de juergas y perversiones. No se interpuso la más tenue barrera entre las profanas pasiones de la tripulación y el ilimitado placer de ellas.
Herman Melville
Lo cierto es que la pena de muerte me merece muy poco respeto. No solo es un juego sucio, que degrada a los perros verdugos que se encargan personalmente de ejecutarla a cambio de un salario, sino que degrada también a la comunidad que la permite, la aprueba con su voto y paga los impuestos necesarios para mantenerla.
Jack London
Pongamos que eran siete mil u ocho mil las personas que debían morir para ganar la guerra contra la subversión.
Jorge Rafael Videla
A nadie le acontece cosa alguna que no sea, por naturaleza, capaz de recordar.
Marco Aurelio
Eso es lo bueno del viaje en el tiempo. Si uno comete un error, siempre puede regresar para enmendarlo.
Orson Scott Card
Antes de dar la bendición os pido un favor, que pidáis al Señor la bendición para su obispo. Hagamos en silencio esta oración vuestra por mí
Papa Francisco
El oído es el único sentido donde el ojo no ve.
Pascal Quignard
A dos hombres venero yo en este mundo: al labrador sufrido de mano callosa y nervuda, puesto que en ella está el cetro de este mundo. Y a aquel que trabaja por las imprescindibles necesidades del espíritu; no por el pan cotidiano, sino por el pan de la verdadera vida.
Thomas Carlyle
Y cuando vives cultivando esperanzas imposibles, ya eres un perdedor. Y cuando te das cuenta, te hundes.
Umberto Eco
Orador es aquel que dice lo que piensa y siente lo que dice.
William Jennings Bryan