Las mujeres no quieren escuchar lo que piensas. Las mujeres quieren escuchar lo que ellas piensan -con una voz más grave.
Bill Cosby
Iluminaste mi existencia llenando el arca vacía de mi corazón.
Alfonso Orantes
Uno debe acostumbrarse a oír todo sin inmutarse, incluso las historias más descabelladas, ponderando la insignificancia de quien habla y sus opiniones, y absteniéndose de cualquier discusión. Ello permitirá luego recordar la escena con satisfacción.
Arthur Schopenhauer
La vida no es aceptable a no ser que el cuerpo y el espíritu vivan en buena armonía, si no hay un equilibrio natural entre ellos y si no experimentan un respeto natural el uno por el otro.
D. H. Lawrence
Di a ti mismo que eres bastante inteligente.
Dr. Seuss
El que de pequeño respeta la bandera, sabrá defenderla cuando sea mayor.
Edmundo de Amicis
Es humano cometer pecados; diabólico, persistir en ellos; cristiano, odiarlos; divino, perdonarlos.
Friedrich von Logau
Mis buenas cualidades te pertenecen ahora, y puedes exagerarlas cuanto se te antoje.
Jane Austen
Creéis que es tanta la diferencia que puede haber entre un hermano socialista, un hermano comunista o un hermano anarquista?
José Díaz Ramos
Un sistema es una combinación de componentes que actúan conjuntamente para alcanzar un objetivo específico.
Katsuhiko Ogata
No sabremos lo que podemos llegar a ser hasta que no sepamos lo que somos capaces de hacer.
Ken Robinson
La educación es para el niño lo que el cultivo para el campo. Por muy bueno que éste sea, si se deja de arar, no produce más que zarzas y malas hierbas.
Marcelino Champagnat
El amor es como un geniecillo travieso que campa por este mundo haciendo las peores trastadas a diestro y siniestro, siempre te gana la partida, no hay quien escape ileso de su perverso juego.
Mercedes Pinto Maldonado
Polvo de humano polvo son sus huesos, mas aunque sean polvo en los caminos, polvo serán de España enamorado.
Ramón de Garciasol
¿Qué hacer? Si yo abandonaba a Allí en el bosque, lo devorarían las fieras, las hormigas gigantes, los buitres. Si lo llevaba conmigo, me infectaba, si ya no lo estaba. ¿Qué hacer? Allí estaba perdido, y yo también, quizá, estaba perdido.
Roberto Arlt
Sólo le pido al Eterno que al despuntar cada día, las sombras de nuestros cuerpos sorprenda la luz unidas.
Salvador Rueda