El autor que habla de sus propios libros es peor que la madre que sólo habla de sus hijos.
Benjamin Disraeli
Si ustedes habláis con casi todos los cantantes, o todos los cantaores, casi todos están fatal con la casa de discos. Se llevan como el gato y el perro. Yo igual. Lo que pasa que llega un momento en el que ya no les hago caso.
Camarón de la Isla
En ocasiones pienso que el premio de quienes escribimos duerme, tímido y virginal, en el confuso corazón del lector más lejano.
Camilo José Cela
En Nicaragua no hay que pensar mucho para convencerse que el camino armado es el único viable.
Carlos Fonseca
Nacimos en un país libre que nos legaron nuestros padres, y primero se hundirá la Isla en el mar antes que consintamos en ser esclavos de nadie.
Fidel Castro
El objeto de los debates o de las discusiones debe ser no la victoria sobre el contrincante, sino nuestro aprovechamiento.
Joseph Joubert
El amor no tiene nada que ver con lo que estás esperando obtener; tiene que ver con lo que estás esperando dar.
Katharine Hepburn
La enfermedad me humilló y me abrió los ojos. Me hizo mirar la vida de forma más objetiva. ¿Si sobrevivo en qué me quiero convertir?
Lance Armstrong
El silencio eres tú: cuerpo de piedra.
Manuel Altolaguirre
¡No nos arrodillaremos!¡No nos rendiremos, sólo tenemos una opción: hasta el fin! ¡Muerte, victoria, no importa; no nos rendiremos!.
Muamar el Gadafi
Monólogo significa: el mono que habla.
Ramón Gómez de la Serna
La vida del hombre consiste en la concordancia de sus partes.
Ramon Llull
Escribir una carta es enviar un mensaje al futuro; hablar desde el presente con un destinatario que no está ahí, del que no se sabe cómo ha de estar (en qué ánimo, con quién) mientras le escribimos y, sobre todo, después: al leernos. La correspondencia es la forma utópica de la conversación porque anula el presente y hace del futuro el único lugar posible del diálogo.
Ricardo Piglia
¡Menudo progreso hemos logrado! En la Edad Media, me hubieran quemado. Ahora les basta con quemar mis libros.
Sigmund Freud
Lo inverosímil es lo que más se parece al milagro.
Umberto Eco
El hombre puede conservar su valor, su dignidad, su generosidad. O bien, en la dura lucha por la supervivencia, puede olvidar su dignidad humana y ser poco más que un animal, tal como nos ha recordado la psicología del prisionero en un campo de concentración.
Viktor Frankl