La resignación, renunciando a toda esperanza, es un consuelo parecido a la muerte, y por eso es un gran consuelo.
Benito Pérez Galdós
Que nunca nadie es malo de repente.
Alonso de Ercilla
Es tan fino que puede que ni siquiera exista.
Brian O'Nolan
Las querellas de los hombres no inquietan a los dioses.
Claudiano
Algunas personas obtienen fama, otras la merecen.
Doris Lessing
Una vez, en la lúgubre media noche, mientras meditaba débil y fatigado sobre el ralo y precioso volumen de una olvidada doctrina.
Edgar Allan Poe
Un hombre hedonista, permisivo, consumista y relativista, no tiene referentes ni puntos de apoyo, y acaba no sabiendo a dónde va, envilecido, rebajado... Convertido en un objeto que va y viene, que se mueve en todas las direcciones, pero sin saber adónde se dirige. Un hombre que en vez de ser brújula, es veleta.
Enrique Rojas
El amor que nace repentinamente más tarda en irse.
Jean de la Bruyere
Me han preguntado por años: John, ¿cómo motivas a la gente? Les he respondido: Me mantengo con entusiasmo; animo a otros; les muestro el camino; creo en la gente.
John C. Maxwell
El fútbol es igual en todas partes. Yo he jugado muchos partidos en Primera. Además, nuestra Liga es de las mejores del mundo aquí los jugadores tienen más calidad, pero es algo a lo que te acostumbras rápido.
José Antonio García Calvo
Al mayor terrorista del mundo, al mayor peligro para nuestros hijos... George Bush.
Manu Chao
La guerra es la mayor plaga que puede afligir a la humanidad. Destruye la religión, destruye a los Estados, destruye las familias. Cualquier calamidad es preferible a ésta.
Martín Lutero
Estás más guapa, más sabia, más civil en otra etapa, cambiaste de perfil, y eso me encanta, me encanta, Madrid, por eso te canto, te canto, Madrid.
Miguel Cantilo
Muamar Gadafi no es el presidente, es el líder de la revolución, no tiene nada que perder.
Muamar el Gadafi
Quién sabe, tal vez no nos amaríamos tanto si nuestras almas no se contemplaran desde tan lejos. Quién sabe, si el destino no nos hubiera separado tal vez no estaríamos tan cerca uno de otro.
Nazim Hikmet
Dejé que nadie moleste mi concentración, Incluso el hambre no me podía molestar.
Soichiro Honda