En caso que por razón del nacimiento contraigamos alguna obligación a la patria particular o suelo que nos sirvió de cuna, esta deuda es inferior a otras cualesquiera obligaciones cristianas o polÃticas.
Benito Jerónimo Feijoó
¿Pues qué es lo que amas, extraordinario extranjero?-¡Amo las nubes..., las nubes que pasan... allá lejos... las maravillosas nubes!
Charles Baudelaire
Tal es el triste sino de todo libro prestado: con frecuencia se pierde, siempre se estropea.
Charles Nodier
La disciplina es actividad, es inteligencia, es saber ser feliz, es controlar los sentimientos negativos y no rendirse en los momentos clave.
David Valois
Si te gustan mis poemas, déjalos caminar en el atardecer, un poco detrás de ti.
E. E. Cummings
Él la ama, pero, a pesar de esto, con ella es la persona más cautelosa del mundo.
Elias Canetti
El cine, su historia, su pasado y su presente, se aprende en la cinemateca. Sólo se aprende allÃ. Es un aprendizaje perpetuo.
François Truffaut
HabÃa despertado una parte de mà que llevaba largo tiempo durmiendo. Al darme cuenta, me sentà tan triste que se me saltaron las lágrimas. Ella habÃa sido una mujer excepcional. Alguien hubiera debido salvarla.
Haruki Murakami
La muerte no nos quita sólo nuestra propia vida, sino las vidas de los demás.
Javier MarÃas
- Ni siquiera me conoces. - Tengo el resto de mi vida para conocerte.
Jessica Lange
La genialidad es una coincidencia. Surge como chispa luminosa en el punto donde se encuentran las más excelentes aptitudes de un hombre y la necesidad social de aplicarlas al desempeño de una misión trascendental.
José Ingenieros
Yo creo que el mejor homenaje que uno puede hacer a las historias que lo impactaron y emocionaron es inventar historias nuevas.
Marcelo Birmajer
Algunas oficinas son como los cementerios. En cada una de sus puertas podrÃa inscribirse: Aquà yace don Fulano de Tal.
Moritz Gottlieb Saphir
Terrorismo no es ETA, es Belén Esteban enseñando las tetas.
Nega
No te desanimes por las fuerzas del mal. Nada puede suceder que Dios no haya permitido.
Steve Maraboli
Seguramente fue el diablo quien enseñó a bailar a las mujeres.
Thomas Fuller