Es felicidad juntar el afecto con el aprecio; el amor introduce la lanza y al paso que ésta entra, sale la estimación.
Baltasar Gracián
La moda mística de estos tiempos, que se muestra particularmente en el crecimiento rampante de la llamada teosofía y espiritualismo, para mi no es más que un síntoma de debilidad y confusión. Como nuestras experiencias consisten en reproducciones y combinaciones de impresiones sensoriales, el concepto de un alma sin cuerpo me parece carente de cualquier tipo de significado.
Albert Einstein
Ni el cobarde hallará puerta segura para escaparse.
Alonso de Barros
No me importan mucho mil rayos de sol, si puedo tan sólo ser una estrella en los ojos de Jesús.
Angelus Silesius
Para el hombre tímido el aire está infestado de demonios.
Anónimo
He visto más bajeza, más tiranía y más servidumbre en algunos días de libertad, que en muchos siglos de despotismo.
Antonio Aparisi y Guijarro
Ni te imaginas cuanta gente te rodea cuando crees estar solo con la mujer a la que amas. Les acompañan muchos hombres de los que no sabes nada, sus amantes pasados, y muchos de los que ni siquiera ella sabe nada, sus amantes futuros.
Arthur Schnitzler
Nadie instaura una dictadura para salvaguardar una revolución, sino que la revolución se hace para instaurar una dictadura.
George Orwell
Al final, todas las operaciones de negocios pueden ser reducidas a tres palabras, gente, producto y beneficios. A menos que tengas un buen equipo, no tienes mucho que hacer con las otras dos.
Jack Welch
Los dramas son inevitables. En el fondo, tampoco tienen mucha importancia. Lo que cuenta es cómo conseguimos superarlos.
Joël Dicker
Los hombres creen gustosamente aquello que se acomoda a sus deseos.
Julio César
Nuestro pasado nos presenta el futuro.
Max Lucado
Si algún varón desea que alguna cosa que hizo no se sepa engáñase sin duda.
Píndaro
De la mano a la boca se pierde la sopa.
Proverbio
El centro del amor no siempre coincide con el centro de la vida.
Roberto Juarroz
El recuerdo permite muchas licencias poéticas. Omite algunos detalles, otros se exageran, según el valor sentimental de los objetos que toca, ya que la memoria radica preferentemente en el corazón.
Tennessee Williams