Mi objeto no es sino el mejoramiento del mundo y la tranquilad de sus pueblos.
Baha'ullah
Viniste al fin, y por eso dejé ir a las libélulas que conservaba cautivas entre mis cinco dedos este atardecer de otoño.
Akiko Yosano
La política debería ser el arte de la sensatez.
Albert Boadella
Corazón determinado no quiere ser aconsejado.
Anónimo
Gocemos, pues, mientras somos jóvenes; tras una alegre juventud, y tras una vejez pesarosa, la tierra será nuestro manto.
En el buen caballero, aunque se encuentre algo reprensible, nada hay que afearle.
Antonio de Guevara
Cada cual es artífice de su propia fortuna.
Apio Claudio el Censor
Este país está condenado al éxito.
Eduardo Duhalde
Hideyoshi, modesto, sutil y complejo; Ieyasu, sereno, paciente y calculador. Sus filosofías divergentes han sido recordadas durante largo tiempo por los japoneses en unos versos que conocen todos los escolares: ¿Qué hacer si el pájaro no canta? Nobunaga responde: ¡Mátalo! Hideyoshi responde: Haz que quiera cantar. Ieyasu responde: Espera.
Eiji Yoshikawa
El poder no es un medio, Wiston. No se establece una dictadura para salvaguardar una revolución; se hace la revolución para establecer una dictadura. El objetivo del poder es el poder.
George Orwell
Me convertí en un niño delante de una muñeca que cierra los ojos cuando se la acuesta.
Georges Brassens
Lo inacabado no es nada.
Henri-Frédéric Amiel
Engendra ruindades la emulación; mas por ella vence el hombre imposibles.
Manuel Tamayo y Baus
El ser humano es ciego para sus propios defectos. Jamás un villano del cine mudo se ha proclamado villano. Tampoco el idiota se denomina idiota. Los defectos existen dentro de nosotros, activos y militantes, pero inconfesos. Jamás he visto un individuo subir al escenario y anunciar, de rostro erguido: 'Señoras y señores, soy un canalla.
Nelson Rodrigues
A veces el carisma de una persona es de tal índole que se infiltra, atravesando nuestras defensas, nuestros prejuicios y nuestras necesarias inhibiciones y se adentra directamente en nuestras entrañas.
Peter Hoeg
No sabe hablar quien no sabe callar.
Pitágoras