La humildad exalta al hombre al cielo de la gloria y poder.
Baha'ullah
El problema no es que sólo usemos el diez por ciento de nuestro cerebro, sino que no utilizamos ni el dos por ciento de las emociones de nuestro corazón.
Albert Espinosa
No hay en el mundo sino una cosa más despreciable que el rico despreciable; y es el adulador de su riqueza.
Antonio Aparisi y Guijarro
Desde la mitad de la vida hacia adelante, solo permanece vital aquel que está preparado para morir con vida.
Carl Gustav Jung
Ha llegado el momento de parar y dedicar más tiempo a la familia.
Carlos Sainz
No existe fortaleza alguna, por más defendida que esta esté, que no pueda conquistarse con dinero.
Cicerón
Hay gentes que viven en su perpetua indigestión y eso hace que les apeste el aliento.
Francis Picabia
Valor perfecto es aquel que lleva al cabo sin testigos lo mismo que sería capaz de hacer delante de todo el mundo.
François de La Rochefoucauld
Deseo. Dos llamas que apagan su calor cuando están más fundidas, y tienen más desolación cuando parecen más unidas.
Homero Aridjis
Señor jefe de prensa de Don Florentino.
José María García
Quien no vive para servir, no sirve para vivir.
Juan Bosch
Todo lo que una persona puede imaginar, otras podrán hacerlo realidad.
Julio Verne
El filósofo no es ciudadano de ninguna comunidad de ideas. Esto es lo que lo hace ser filósofo.
Ludwig Wittgenstein
El conocimiento comienza por la práctica y todo conocimiento teórico, adquirido a través de la práctica, debe volver a la práctica.
Mao Zedong
No trabajas para ganar dinero, sino para justificar la vida.
Marc Chagall
Las palabras tienen que encontrar la mente de un hombre si pretenden llegar a su corazón, y la mente de algunos hombres es lamentablemente pequeña. La música llega al corazón por pequeña o acérrima que sea la mente de quien la escucha.
Patrick Rothfuss