Está bien leer mucho, estudiar con ahínco, se decía con frecuencia: pero observar a las personas le sirve más a un escritor que la lectura de los mejores libros. El autor que se olvide de esto está perdido.
Augusto Monterroso
Existe algo más fuerte que la muerte y este algo es el valor que la soporta impertérrito.
Anónimo
Oyéndoles hablar, me ha parecido a veces que la lengua es un órgano que les estorba.
Benito Pérez Galdós
Tal vez no haya habilidad psicológica más esencial que la de resistir al impulso.
Daniel Goleman
Nada es más libre que la imaginación humana.
David Hume
En absoluto hay que sentir más vergüenza ante los hombres que ante uno mismo ni hacer algún mal si nadie va a saberlo con más motivo que si van a saberlo todos los hombres, sino que uno debe sentir vergüenza especialmente ante uno mismo e inculcar este principio en el alma como para no hacer nada incoveniente.
Demócrito
Nosotros somos el camino, la verdad y la vida.
Fernando Arrabal
Quien posee mujer e hijos ha entregado rehenes a la fortuna.
Francis Bacon
Hay más simplicidad en el hombre que come caviar por impulso, que en el que como nueces por principio.
Gilbert Keith Chesterton
Si le doy de comer a los pobres, me dicen que soy un santo. Pero si pregunto por qué los pobres pasan hambre y están tan mal, me dicen que soy un comunista.
Hélder Câmara
El individuo no puede orientarse en el universo sino a través de su raza, porque va sumido en ella como la gota en la nube pasajera.
José Ortega y Gasset
Buen silencio vale más que mala disputa.
José Selgas
Ningún país podía sobrevivir al éxodo de sus jóvenes más emprendedores.
Ken Follett
El único que cuenta es el innovador, el que disiente, el que proclama cosas que nadie ha oído antes, el hombre que rechaza los estándares tradicionales y busca sustituir los viejos valores e ideas por otros.
Ludwig von Mises
Si no fuera por el gobierno, no tendría de qué reirme.
Nicolas Chamfort
Pongo a Dios por testigo de que no podrán derribarme. Sobreviviré, y cuando todo haya pasado, nunca volveré a pasar hambre, ni yo ni ninguno de los míos. Aunque tenga que mentir, robar, mendigar o matar, ¡Pongo a Dios por testigo de que jamás volveré a pasar hambre!
Vivien Leigh