Existe gente que sueña y se queda quieta, y gente que sueña y hace realidad lo que sueña, o lo intenta. Eso es todo... Luego, la vida hace girar su ruleta rusa. Nadie es responsable de nada.
Arturo Pérez-Reverte
La luz no hace más que alumbrar el camino, pero no da a los hombres fuerza para recorrerlo.
Benjamin Constant de Rebecque
El matrimonio es una cosa tan bella, que es preciso pensar en él toda la vida.
Charles Maurice de Talleyrand
Un hombre lleno de si mismo, siempre está vacío.
Charles Régismanset
Un día le dije a mi madre: mamá, quiero ser actor, y ella dijo: no, no quieres, y le dije: Ok.
Daniel Radcliffe
Cuanto más duramente se oprime la verdad, más fuerza toma, y la explosión será terrible.
Émile Zola
Sólo existes por lo que haces.
Federico Fellini
Gracias a la cooperación de la mano, de los órganos del lenguaje y del cerebro, no sólo en cada individuo, sino también en la sociedad, los hombres fueron aprendiendo a ejecutar operaciones cada vez más complicadas, a plantearse y a alcanzar objetivos cada vez más elevados.
Friedrich Engels
El mal es el mal. Menor, mayor, mediano, es igual, las proporciones son convenidas y las fronteras son borrosas. No soy un santo ermitaño, no siempre he obrado bien. Pero si tengo que elegir entre un mal y otro, prefiero no elegir.
Henry Cavill
Los hombres mayores declaran la guerra. Sin embargo, son los jóvenes los que deben luchar y morir.
Herbert Hoover
Si no hay justicia no hay paz y vuestro puto todo por la patria me hace vomitar.
Kase.O
Realmente, perder de vista la lucha de clases evidendencia la más burda incomprensión del marxismo.
Lenin
No puede el hombre sentirse a gusto sin su propia aprobación.
Mark Twain
El pueblo libio triunfará, la libertad triunfará, estamos determinados a preservar la unidad de Libia incluso con nuestras vidas.
Muamar el Gadafi
Me ha ocurrido que cuando la alabanza inglesa absorbía mi personalidad, alejándome de los vínculos espirituales que me ligan a la patria, he abandonado Londres más que de prisa, para ir a España. ¡No, no!; antes que nada, ¡soy español!
Ramiro de Maeztu
¡Stalin! ¡El gran Stalin! Es probable que tuviera una voluntad de hierro, pero era más débil de carácter que cualquiera. Un esclavo del tiempo y de las circustancias, resignado y humilde servidor del día de hoy que abre de par en par la puerta a los nuevos tiempos. Sí, y los que no se postraron ante los nuevos tiempos acabaron en la basura.
Vasili Grossman