Es imposible formular una política a fuerza de pasión y desesperanza.
Arthur Koestler
Cada amigo representa un mundo dentro de nosotros, un mundo que tal vez no habría nacido si no lo hubiéramos conocido.
Anaïs Nin
¿Qué meditas tan profundamente? la mujer vestida del sol, con la luna bajo sus pies, tiene que ser tu alma.
Angelus Silesius
Hallarás la distancia que te separa de ellos, uniéndote a ellos.
Antonio Porchia
Si de verdad estamos solos, cuánto espacio desaprovechado.
David Morse
Si la pintura no fuera tan difícil, no sería divertido.
Edgar Degas
Un hombre inteligente se creará más ocasiones favorables de las que encuentra.
Francis Bacon
La Naturaleza, a menudo permanece oculta, algunas veces se prosterna vencida, muy rara vez, sin embargo, es extirpada.
Si uno pretende cautivar a la gente debe entender qué piensa, siente y cree.
Guy Kawasaki
Hoy está con nosotros en su calidad de demoledor de teorías. Y si no muerde su sentido de la realidad, aunque sólo sea con un mordisco pequeño, con este la fe de nuestros padres, entonces comprueben su pulso. Puede que estén ustedes muertos.
Harlan Ellison
Las coquetas son como los cazadores que se ufanan en cazar, pero que no comen la presa.
Honoré de Balzac
Los legisladores jamás deben permitir que se restrinja la libertad de expresión por el simple hecho de que los creyentes se sientan ofendidos.
Ismael Leandry Vega
Decidimos cruzar el país haciendo el menor daño que podamos, si se nos deja volver a nuestra patria; pero si alguien nos impide el paso, decidimos luchar contra éste con todas nuestras fuerzas.
Jenofonte
Todos matamos a aquellos que amamos. ¡Que todos lo sepan! Unos lo hacen con una mirada dura, otros pon una lisonjera palabra; el cobarde con un beso, el valiente con una espada.
Oscar Wilde
Es un alivio llorar; las penas se desahogan y son arrastradas por las lágrimas.
Ovidio
Aprendí el vocabulario del amo, dueño y patrón, me mataron tantas veces por levantarles la voz, pero del suelo me paró, porque me prestan las manos, porque ahora no estoy solo, porque ahora somos tantos.
Víctor Jara