Para que un hombre sea realmente feliz es menester que esté contento de sí mismo.
Armando Palacio Valdés
Es bastante vergonzoso haber estado ocupado durante toda la vida por el problema del ser humano y haber descubierto que uno no tiene mucho más que ofrecer, a modo de consejo, que el consabido: Intenta ser un poco más amable.
Aldous Huxley
Un hombre tonto no es capaz de hacer en ningún momento de su vida los disparates que hacen a veces las naciones, dirigidas por centenares de hombres de talento.
Benito Pérez Galdós
Cuando la mujer tiene sus orejas llenas, apenas puede refrenar su lengua.
Étienne Jodelle
Y siempre abrazar, gente, tierra, cielo, estrellas, como yo, libremente.
Frank O'Hara
A las muchachas las amamos por lo que son; a los muchachos, por lo que prometen ser.
Goethe
Hay dos clases de pobres: los que son pobres juntos y los que lo son solos. Los primeros son los verdaderos, los otros son ricos que no han tenido suerte.
Jean-Paul Sartre
No habrá ningún cambio si la gente está empeñada en pensar de manera negativa.
John C. Maxwell
Si quieres perderte, tienes que perderte en otra persona.
Julianne Moore
¡Oh, libertad preciosa, no comparada al oro, ni al bien mayor de la espaciosa tierra, más rica y más gozosa que el precioso tesoro que el mar del sur entre su nácar cierra.
Lope de Vega
Creo que no hay mejor vida que la de un futbolista.
Manuel Preciado
La felicidad de tu vida depende de la calidad de tus pensamientos: por lo tanto, Guardia en consecuencia, y cuidar de que se entretienen sin nociones inadecuadas a la virtud y el carácter razonable.
Marco Aurelio
Las arrugas del espíritu nos hacen más viejos que las de la cara.
Michel de Montaigne
En la antigüedad los libros eran escritos por hombres de letras y leídos por el público. Hoy en día los libros son escritos por el público y leídos por nadie.
Oscar Wilde
Cuando el ser humano examina la religión desde un punto de vista crítico y en lugar de obediencia y temor ciego busca convicciones basadas en la razón, esa condición no puede mantenerse mucho tiempo. La contradicción interna es una sentencia de muerte para toda ética, un gusano que roe la energía del hombre.
Piotr Kropotkin
El que llega primero al campo de batalla espera la llegada del enemigo fresco para combatir. Quien llega tarde al campo de batalla tiene que apresurarse y arriba exhausto al combata.
Sun Tzu