El carácter es aquello que revela la finalidad moral, poniendo de manifiesto la clase de cosas que un hombre prefiere o evita.
Aristóteles
Yo trato de privarme de ideas. Todos los días me quito alguna, pero siempre me quedan demasiadas.
Agustín García Calvo
La vejez es una enfermedad como cualquier otra en la cual al final uno se muere irremisiblemente.
Alberto Moravia
En fin, lo que lamento profundamente es que, a partir del siglo XVIII, en España no se hermanara, como hizo la Revolución Francesa, la palabra ciudadano con patria, solidaridad, bien, esfuerzo y memoria común. Aquí no hubo guillotina para obispos, reyes y aristócratas; aquí siempre se ha fusilado a los mismos y de manera equivocada.
Arturo Pérez-Reverte
Fórmulas sencillas para resolver problemas complejos, no las conozco.
Conde de Romanones
Ningún ruido en las ciudades ni en el campo oía; sólo se hace de la tierra dueño, lleno de olvido y de silencio el sueño.
Estacio
La amabilidad de los alemanes es inversamente proporcional a su éxito.
Galeazzo Ciano
Siempre que te enfrentes al enemigo conquístale mediante el amor.
Mahatma Gandhi
El papeleo es el alma de Rusia, la agricultura es sólo su estómago.
Matthew Macfadyen
A diferencia de lo bien definido, un juego preciso como la ruleta rusa, donde los riesgos son visibles para cualquier persona capaz de multiplicar y dividir por seis, no se observa el cañón de la realidad.
Nassim Taleb
Los políticos son siempre iguales. Prometen construir un puente incluso donde no hay río.
Nikita Jrushchov
Proporcionar un motivo destruye el amor. Dar un sentido a lo que se ama es mentir. Pues ningún ser humano experimenta otra alegría que no sea la sensación de estar vivo cuando esta sensación se vuelve intensa. Y no hay otra vida.
Pascal Quignard
Si no quieres verte en apuros, divide siempre la responsabilidad.
Paulo Coelho
La risa no es más que la gloria que nace de nuestra superioridad.
Thomas Hobbes
Todas las generaciones piensan que están presenciando el fin del mundo, pero yo noto que lo estoy viviendo de verdad.
Walter Lassally
La fuerza principal de la conducta es hoy la aspiración a vivir como los ídolos públicos.
Zygmunt Bauman