La virtud, como el arte, se consagra constantemente a lo que es difícil de hacer, y cuanto más dura es la tarea más brillante es el éxito.
Aristóteles
Si hablamos de reyes, no hacemos honor a la sabiduría sino al poder.
Alejandro Jodorowsky
Sólo en términos de asignación de recursos de tiempo, la religión no es muy eficiente. Hay mucho más que podría hacer en una mañana de domingo.
Bill Gates
Al estar determinados por costumbre a trasladar el pasado al futuro en todas nuestras inferencias, cuando el pasado ha sido absolutamente y regular y uniforme, esperamos el acontecimiento con la máxima seguridad y no dejamos lugar para la suposición contraria.
David Hume
¡Qué apocado ha de ser el que no soporta el dolor del otro!
Elias Canetti
Tenemos tanta suerte de estar vivos.
Emilia Clarke
El hombre quiere que la mujer sea pacífica; pero en realidad es esencialmente belicosa, como el gato.
Friedrich Nietzsche
Y a esa hora yo me estaba afeitando para salir a patrullar.
Héctor Veira
No hay que escribir sino en el momento en que cada vez que mojas la pluma en la tinta, un jirón de tu carne queda en el tintero.
León Tolstói
El Chimborazo me tomó de la mano para ascender con orgullo los altísimos estamentos ideales, de la belleza y la verdad.
Luis Alberto Costales
Acepto que soy el responsable, pero no soy un inútil.
Marcelo Bielsa
Si alguien quiere hacerse rapidamente socialista, que viaje a los Estados Unidos.
Máximo Gorki
La historia de Bolivia ha sido escrita contra Bolivia. El anti bolivianismo de las páginas de historia, fomentan la colonia. Para conseguir nuestra independencia económica, junto a nuestra independencia política, para ser libres de verdad, necesitamos una historia de Bolivia escrita con alma de bolivianos.
Óscar Únzaga
Pues la que más celosa se muestra, más colérica y furiosa, más entonces desea satisfacciones, aunque no las crea.
Pedro Calderón de la Barca
La política es una profesión muy gratificante. Si tienes éxito, recibes muchas recompensas; si fracasas, siempre puedes escribir un libro.
Ronald Reagan
La contemplación de si mismo es, infaliblemente, un síntoma de enfermedad.
Thomas Carlyle