Cien hombres, juntos, son la centésima parte de un hombre.
Antonio Porchia
No me debes nada por darte el amor que te doy, no me debes nada por importarme de la forma en que me has importado. Te doy gracias por recibir, el privilegio es mío. Y tú no me debes nada a cambio.
Alanis Morissette
He llegado a la conclusión de que el cine es como la novela, un género artificioso, mentiroso, condenado a envejecer con la vejez más triste y a desaparecer.
Fernando Vallejo
Estabamos al borde del precipicio, pero dimos un gran paso para evitarlo.
Gregorio Álvarez
Idealista es el que se toma la ficción en serio.
Jesús G. Maestro
La verdadera cuestión española -es que- el Estado carece de autoridad positiva para hacer frente a las fuerzas de la disgregación.
José Ortega y Gasset
Tienes un poder pero aún no lo sabes.
Kristen Wiig
Y sin embargo tú reapareces inédita en tu gesto para decirme hoy que le conteste al tiempo y sus preguntas el práctico saber que tienes de mi cuerpo.
Luís García Montero
Quien se preocupe por la coherencia será falso porque sólo las mentiras pueden ser coherentes. La vida cambia sin cesar.
Osho
¿A quién le cabe más que al artista, la defensa de la libertad tan esencial para su labor creadora?
Pablo Casals
Por desgracia, en todas las épocas de la historia existen Herodes que traman planes de muerte, destruyen y desfiguran el rostro del hombre y de la mujer.
Papa Francisco
Dos perros pueden matar a un león.
Proverbio Hebreo
Cualquiera que vaya al psiquiatra debería examinarse la cabeza.
Samuel Goldwyn
Nada podía explicarse ni comprenderse adecuadamente, nada podía conocerse del todo. En ello se encerraba la emoción más profunda.
Taylor Caldwell
¡Si Dios tan solo me diera una clara señal!, como hacer un generoso depósito a mi nombre en un banco suizo.
Woody Allen
De pronto me sentí a mí mismo, y a mi propio yo. Todos aquellos que se dan cuenta de Sí Mismos, son conscientes de su individualidad, pero solamente el ojo inflamado, el dedo lastimado, el diente enfermo se evidencian; pues el ojo sano, el dedo indemne, y el diente intacto no parecen existir. De modo que, sin duda alguna y con absoluta certeza, uno está enfermo cuando siente su propia personalidad.
Yevgueni Zamiatin