Es la emoción la que nos acerca a la realidad, que es infinita y diversa.
Antonio López García
A la bolsa hay que amarla ardientemente, pero tratarla con frialdad.
André Kostolany
Por lo que a instituciones y leyes se refiere, no sé decir quién las pone en mayor peligro: si aquellos que observan rigurosamente todas sus formalidades, o bien los que no las observan lo bastante.
Arturo Graf
Para saborear todo cuanto ofrece de delicioso un paseo por la orilla del arroyo, es preciso que el derecho de la pereza haya sido vencido con el trabajo y que el espíritu cansado tenga necesidad de adquirir nuevo aliento contemplando la naturaleza.
Élisée Reclus
Ser comprendidos no es necesario.
Filippo Tommaso Marinetti
¡Bienvenido sea el dolor si es causa de arrepentimiento!
Georg Wilhelm Friedrich Hegel
El placer no es sino la felicidad de una parte del cuerpo.
Joseph Joubert
La clave para comprender y percatarse plenamente de todo lo que los Profetas han dicho, se halla en el conocimiento de las figuras, de sus ideas generales y del sentido de cada una de las palabras que contienen.
Maimónides
Mi madre me enseñó a amar a la gente y a tratarla de buena manera. Es una persona dulce y maravillosa a la que le gusta cocinar, hacer ropa y estar con la familia. No bebe, fuma ni molesta. Nadie ha sido mejor conmigo en mi vida entera.
Muhammad Ali
Con la autoridad y la orientación de una mujer así como compañera, cualquier hombre puede alcanzar un éxito destacable.
Napoleon Hill
- Mira esa puesta de sol. Es perfecta. - Sí. Es el trabajo de Dios. - Tiene un excelente pincel.
Noah Emmerich
Muerte: el túnel al fin de la luz.
Paul Carvel
Iniciamos una etapa que sin duda será difícil, porque tenemos todos, la enorme responsabilidad de asegurar hoy, y para los tiempos, la democracia y el respeto por la dignidad del hombre en la tierra argentina.
Raúl Alfonsín
Bueno si usan bencina es porque tienen auto y si tienen auto es porque tienen plata.
Ricardo Lagos
Nada se pierde de lo que está depositado en la memoria.
Saul Steinberg
Sin la claridad os falta todo.
Tomás de Iriarte